La multinacional recortará 6.000 empleos en todo el mundo tras su frustrada fusión con Tata
BERLÍN, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El grupo industrial alemán Thyssenkrupp registró un beneficio neto atribuible de 36 millones de euros en los seis primeros meses de su año fiscal, lo que representa un retroceso del 88,7% en comparación con su resultado del mismo periodo del ejercicio anterior, informó la compañía, que recortará 6.000 puestos de trabajo en todo el mundo tras fracasar sus planes de fusión con la india Tata y prevé cerrar en pérdidas su año fiscal.
En el primer semestre de su ejercicio, Thyssenkrupp recibió pedidos valorados en 20.471 millones de euros, un 4,3% más, mientras que las ventas netas sumaron 20.374 millones, un 1,9% por encima de la cifra del mismo periodo del año precedente, con un crecimiento del 3% del negocio de componentes y del 5,4% en la división de ascensores.
El Ebit ajustado de la compañía alemana registró una caída del 48,2%, hasta 442 millones de euros, con un descenso del margen al 2,2% desde el 4,3% anterior.
En el segundo trimestre de su ejercicio, Thyssenkrupp registró pérdidas de 99 millones de euros, frente al beneficio neto de 240 millones del mismo periodo del año anterior, mientras que sus ventas aumentaron un 2%, hasta 10.638 millones.
La deuda financiera neta de Thyssenkrupp al final del periodo sumaba 4.834 millones, un 36,3% más que un año antes.
De cara al conjunto del ejercicio, la alemana indicó que espera registrar un beneficio neto "negativo" como consecuencia de los gastos de reestructuración y provisiones a corto plazo, así como por los preparativos para la salida a Bolsa de su negocio de ascensores.
La semana pasada, el grupo industrial alemán informó de la cancelación de su escisión en dos compañías debido al entorno macroeconómico y a los problemas para defender la creación de la 'joint venture' entre la firma germana y la india Tata Steel ante la Comisión Europea, tras lo cual anunció su intención de sacar a Bolsa su división de ascensores.
Por este motivo, el consejero delegado de Thyssenkrupp, Guido Kerkhoff, anunció que la multinacional lanzará un plan de ajuste en todo el mundo, que supondrá el recorte de 6.000 puestos de trabajo, incluyendo 4.000 en Alemania.
