MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, afirmó este domingo que su sindicato no va a proponer a empresarios y Gobierno ampliar el periodo que se utiliza para calcular la cuantía de la pensión, ahora situado en quince años, aunque sí se mostró dispuesto a "escuchar" las propuestas que se hagan sobre el tema en la mesa de diálogo social.
"Si alguien propone hablar del periodo de cálculo de las pensiones, escucharemos, lo cual no quiere decir que de antemano estemos de acuerdo con que haya que ampliarlo. Preferimos, por el contrario, actuar sobre los ingresos del sistema de la Seguridad Social, y eso significa fundamentalmente hablar sobre el empleo, tanto en términos de cantidad como de calidad", precisó.
Toxo, en una entrevista con Europa Press, se mostró "convencido" de que la Seguridad Social necesita reformas, aunque no en la línea que ha propuesto el Gobierno, centrada en medidas para recortar el gasto como el retraso de la edad de jubilación legal desde los 65 a los 67 años.
Aunque esa iniciativa provocó una movilización de los sindicatos y el rechazo de casi todas las formaciones políticas, Toxo recordó que el Gobierno no la ha retirado, si bien parece haber matizado su propuesta inicial.
"Yo no doy por retirada esa propuesta, pero lo mejor que podría hacer el Gobierno, aunque tenga que ponerse colorado durante un rato, es retirarla y evitarse el sofoco de verse derrotado o corregido en el Parlamento", opinó.
Para CC.OO., lo más urgente ahora en materia de Seguridad Social es cumplir los compromisos que quedan pendientes del acuerdo de pensiones que Gobierno, sindicatos y empresarios firmaron en 2006, entre ellos la integración de regímenes, el anticipo de la edad de jubilación en trabajos penosos y de peligrosidad y la separación completa de fuentes de financiación. "Si adicionalmente hay que actuar sobre otros factores, escucharemos las propuestas de las partes", insistió.
LA ACTITUD DE CEOE, "SENSIBLEMENTE DISTINTA".
En relación al proceso de diálogo social para la reforma del mercado laboral, Toxo confió en que sea posible el acuerdo en un plazo breve y que no se repita el "sonoro fracaso" que cosecharon Gobierno y agentes sociales en julio de 2009, cuando rompieron las negociaciones.
En aquel entonces, explicó el dirigente sindical, la CEOE "no supo situarse en el proceso" y acudió a él con una percepción "bastante errónea" de lo que demandaba el mercado laboral. Sin embargo, Toxo aprecia una actitud "sensiblemente distinta" en la patronal en el actual proceso.
"En la mesa de negociación, la patronal tiene una posición normal, aunque haya diferencia de visiones. A veces hay un poco de ruido externo, sobre todo cuando hablan pretendidos asesores de la patronal que se arrogan funciones que la propia patronal ni siquiera les ha otorgado y que dificultan un poco los procesos", subrayó.
Uno de los temas que se está discutiendo en el diálogo social es la revisión del modelo de bonificaciones a la contratación, cuyo uso "se ha pervertido" y que, según Toxo, deben recuperar su función: la de impulsar el empleo en aquellos colectivos más desfavorecidos, como los parados de larga duración o las personas con discapacidad.
Además de mantenerlas en los casos de violencia de género y discapacidad, Toxo cree que convendría reorientar estas bonificaciones hacia los jóvenes, que son los que más están padeciendo los efectos de la crisis en términos de paro.
NO A UNA REBAJA GENERALIZADA DE COTIZACIONES.
Sobre la posibilidad de eliminar las bonificaciones y sustituirlas por una rebaja generalizada de cotizaciones, tal y como ha sugerido la patronal, Toxo avisó de que una reducción general de cotizaciones sólo serviría para abaratar los costes del factor de trabajo. "Ese no es el problema en España", indicó.
Preguntado por si el paro llegará a los cinco millones de desempleados, el líder de CC.OO. apuntó que alcanzar esa barrera dependerá precisamente de las medidas que se adopten.
En este sentido, advirtió de que si no se toma ninguna, podría darse "el peor de los escenarios", y animó a anticipar algunas de las iniciativas que se están discutiendo en el diálogo social (como la aplicación en España del modelo alemán) para impedir que se dispare el desempleo.
