BRUSELAS, 30 Sep. (EP/AP) -
La Unión Europea y Estados Unidos han fracasado en las negociaciones para fijar un protocolo de intercambio de datos de pasajeros de vuelos antes del fin del sábado, lo que podría traducirse en importantes multas o pérdida del derecho de aterrizaje para las aerolíneas comerciales que no proporciones los datos de los pasajeros a las autoridades estadounidenses, explicaron fuentes de Bruselas.
"No hay acuerdo. A partir de la medianoche de hoy existe un vacío legal. Tendremos que hablar a nivel de la Comisión qué debemos hacer ahora", afirmó el portavoz del ejecutivo comunitario, Jonathan Todd, quien añadió que la Comisión trataría el asunto el próximo jueves.
Estados Unidos estableció multas de hasta 4.700 euros por pasajero para aquellas compañías que no proporcionasen los datos personales de los pasajeros 15 minutos después de despegar hacia territorio norteamericano. También amenazaron a las compañías que incumplieran la normativa con retirarles los derechos de aterrizaje.
El Tribunal de Justicia europeo estableció el pasado mes de mayo un dictamen que consideraba ilegal el marco legislativo vigente implantado por Estados Unidos por sustentarse en una base jurídica inadecuada. El Tribunal estableció además la fecha límite del 30 de septiembre para que ambas administraciones pactaran un nuevo marco legislativo.
La Unión Europea negoció el actual acuerdo con EE UU tras los atentados terroristas del 11-S y después de que Washington adoptara una normativa que obligaba a las compañías aéreas proporcionar a las autoridades norteamericanas los datos de los pasajeros que vuelan al país. En la actualidad la obligación consiste en aportar 34 datos personales 15 minutos antes del despegue del aparato.
Tras el fallo del Tribunal, el vicepresidente de la Comisión y responsable del área de Justicia, Franco Frattini, planteó cambiar los elementos jurídicos del texto normativo sin por ello cuestionar el fondo del acuerdo, denunciado ante Luxemburgo por el Parlamento Europeo, al entender que vulneraba los derechos individuales.
De sellarse un nuevo acuerdo, que será ratificado "tan pronto como sea posible", según la Comisión, éste tendrá caracter temporal y durará un año. Después se volverá a debatir en el seno de la UE la redacción de uno definitivo, debate en el que la Eurocámara reclama participar.
