VALLADOLID/OVIEDO/SANTIAGO, 2 May. (EUROPA PRESS) -
Adif ha autorizado en el Consejo de Administración la licitación del concurso público para el nuevo modelo de mantenimiento de infraestructura y vía de la red convencional para preservar la seguridad de las líneas, alcanzar los niveles deseados de fiabilidad y mejorar la calidad así como el seguimiento de las incidencias que repercutan en las obras.
El importe global del contrato será de 275.930.569 euros y tendrá un plazo de ejecución de 24 meses con posibilidad de prórroga por otros dos años.
"De esta forma, Adif realiza una importante apuesta por el mantenimiento de la red convencional que queda de manifiesto tanto en el incremento del presupuesto destinado como en las mejoras que se introducen para gestionar y controlar los programas de trabajo que deben desarrollarse, la resolución de incidencias y las garantías de cumplimiento incluidas en el contrato", ha explicado el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias.
Así, el mantenimiento de la red pasa de contar con una partida anual de 98,5 millones de euros a 102,5 millones a los que se suman además otros 31,5 millones de euros anuales para actuaciones correctoras programadas, lo que representaría un incremento del 36 por ciento.
El pliego define los medios necesarios, la forma de pago y el modelo de gestión de cada una de las actividades objeto del mismo y divide la adjudicación en siete lotes por ámbitos geográficos (Centro, Noroeste, Norte, Este, Noroeste y Sur, más un lote para la Red de Ancho Métrico), frente a los 20 contratos actuales, "lo que permite optimizar los recursos humanos y materiales requeridos en cada lote".
Según han precisado las mismas fuentes, no se limitan los lotes a los que concurrir, "favoreciendo la mayor concurrencia y sin poner trabas a la competencia, sin que suponga una merma de las condiciones del servicio, si bien una vez adscritos los medios a un lote serán exclusivos de ese contrato".
El contrato contempla una serie de actuaciones de mantenimiento regulares (inspecciones y actuaciones en infraestructura, vía y desvíos, entre otras) que Adif abonará a través de un canon de mantenimiento fijo anual ya mencionado, establecido en 68.697.500 euros.
El adjudicatario establecerá junto a Adif la programación de las actuaciones necesarias, con medios materiales y humanos de "disponibilidad constante y exclusiva" asociados al canon.
El abono se realizará mediante facturación mensual, ligado a la consecución de los objetivos de calidad y el grado de cumplimiento determinados por los indicadores, "en función de los que se establecerán unos coeficientes de penalización sobre el importe máximo de canon de mantenimiento fijado".
Además, se establece una partida anual de 33.800.000 euros para actividades de mantenimiento no regulares, "es decir aquellas derivadas de inspecciones o incidencias que, por su envergadura o naturaleza, no puedan realizarse exclusivamente con los medios humanos y materiales ligados al canon", han informado también desde Adif.
También se incluyen actuaciones correctoras programadas con una dotación anual de 31.500.000 euros que engloban trabajos de mejora que supondrán ahorros futuros en el mantenimiento. Estas actuaciones se gestionarán mediante un Acuerdo Marco y su presupuesto máximo de licitación por actuación no podrá exceder de 250.000 euros (con IVA).
Por otra parte, a partir de la anualidad 2019 también se incluirán en los contratos de mantenimiento las labores de control de vegetación en márgenes e instalaciones ferroviarias para la prevención de incendios(limpieza de vegetación en márgenes, desbroce, tratamientos herbicidas, etc.) Estos trabajos también serán gestionados mediante Acuerdo Marco.
Adif introducirá penalizaciones en función de unos indicadores de calidad y cumplimiento entre ellos el tiempo medio de respuesta ante incidencias, el tiempo perdido por circulaciones por existencia delimitaciones temporales de velocidad (LTV) imputables al mantenimiento, la calidad de la vía y el grado de cumplimiento de los programas de trabajo.
Así, se exigirá a las adjudicatarias que en el plan de trabajo con ladescripción de las tareas a realizar se incorpore la eliminación de las LTV. Asimismo, se fijan unos tiempos máximos de respuesta ante incidencias (plazo en el que el adjudicatario debe estar en el lugar de la misma con los medios humanos y materiales necesarios para su resolución), que deben ser inferiores a una hora y 30 minutos en Cercanías, a dos horas y 30 minutos en Larga Distancia y a cuatro horas en líneas de tráfico débil o exclusivas para mercancías.
