MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Comisiones Obreras iniciará una serie de acciones y estrategias para garantizar que el anuncio de compra de Opel por PSA no repercuta negativamente en la actividad tanto del sector del automóvil como del auxiliar y de componentes en España y que el país continúe siendo un referente en esta industria, según ha informado el secretario general de CC.OO. de Industria, Agustín Martín, este martes en una rueda de prensa.
Asimismo, desde CC.OO. han anunciado que uno de los aspectos más importantes es la posibilidad que tendrá el sindicato de estar en las negociaciones de los acuerdos que a partir de ahora se llevarán a cabo entre PSA y Opel mediante el Comité de Empresa Europeo. De esta manera, desde el sindicato defenderán los convenios colectivos y acuerdos de asignaciones e inversiones previstas en el sector.
En este sentido, CC.OO. exigirá a los gobiernos central y autonómicos un posicionamiento claro de apoyo a la industria y al empleo que este genera. Por ello, solicitará una reunión en los próximos días con el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, así como con los presidentes de las comunidades autónomas donde se ubican las tres plantas: Aragón (Figueruelas), Galicia (Vigo) y Madrid (Villaverde).
Por otra parte, iniciarán contactos con los sindicatos de Francia y Alemania con la idea de coordinar actuaciones ya que esta operación tendrá repercusión en el ámbito europeo, conviertiendo a PSA en el cuarto grupo más potente en Europa. También solicitarán una reunión con Carlos Tavares, presidente del grupo PSA, aprovechando su estancia en España.
De igual forma, requerirán una reunión con carácter urgente con el sector de la automoción en España, Anfac y Sernauto, debido a que no solo se busca tener especial cuidado con la industria del automóvil sino con toda la actividad que le rodea.
Agustín Martín indicó que "más allá de la incertidumbre que produce una operación de estas características, ésta tiene que verse como una oportunidad", asegurando además que se trata de plantas que "han hecho sus deberes, son productivas y, por ende, capaces de afrontar la puesta en marcha de un nuevo modelo".
De igual modo, Agustín Martín insistió en que el mensaje de CC.OO. es de "tranquilidad sin que ello conlleve pasividad", mientras que las principales preocupaciones del sindicato son que se mantenga el empleo, las condiciones pactadas y los compromisos de ubicación de productos y de inversiones.
En la reunión han estado presentes tanto la secretaria general de Industria, Ana Sánchez, como el secretario general de la Sección Sindical de GM, José María Fernando.
