MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, pidió hoy que se deje trabajar a los investigadores "sin presiones", porque lo que interesa "es saber toda la verdad" sobre el accidente aéreo de Barajas, en el que perdieron la vida 154 personas, "por respeto a las víctimas y para tener garantías de seguridad en el futuro".
Álvarez recordó en declaraciones a 'Telecinco' recogidas por Europa Press que la comisión de investigación de accidentes es autónoma, y subrayó que su responsable "ya ha dado la información que puede dar".
La ministra también se refirió a las noticias publicadas en prensa sobre las causas del accidente y dijo que "si tienen un origen real" le parece "muy mal" que los investigadores hayan filtrado la información, porque "tienen la obligación de mantener en silencio su trabajo hasta que decidan en pleno cuáles fueron las causas del accidente".
En cualquier caso, la titular de Fomento lanzó "un mensaje de confianza en el sector aéreo" español y destacó su "nivel de seguridad". "Tenemos muy buenas compañías", dijo Álvarez, y subrayó que los aviones españoles están sometidos a más de tres inspecciones al año" similares a la ITV de los vehículos. Además, a éstas se añaden las revisiones diarias, las que se realizan cuando se cumplen determinadas horas de vuelo y la "gran parada", que se realiza al cumplir la aeronave cinco años, en la que se desmonta el avión.
En este sentido aseguró que España es el segundo país de Europa que más inspecciones realiza a aeronaves extranjeras, por delante de países como Alemania o Reino Unido, que tienen más aviones y vuelos.
La ministra señaló que "ha habido un problema en el avión y habrá que ver quién fue el culpable", aunque "por prudencia y rigurosidad" hay que esperar a que termine la investigación "para pedir cuentas".
Fomento tiene "toda la responsabilidad de la seguridad de los aeropuertos y de la navegación aérea", aseguró Álvarez, y señaló que aunque la oposición "trata de sacar punta", incluido en un momento como este, "se ha portado relativamente bien", pero "siempre hay alguien que no puede evitar la tentación".
"Air Madrid es el ejemplo más claro de la seriedad y regularidad" del Ministerio, ya que se tomaron decisiones sobre la seguridad de la aerolínea que no se habían adoptado nunca. "Soporté una presión grandísima", señaló la ministra, que "prefería que se quedaran colgados (los pasajeros) en el aeropuerto antes de que sufrieran un accidente".
Asimismo, recordó que el número de inspectores se ha elevado "por encima de la etapa del PP" (+142%), haciendo "un gran esfuerzo".
La ministra indicó que este suceso ha sido "muy trágico" y dijo que "los familiares y los que participaron en las tareas de rescate están sufriendo mucho dolor, "hay que darles mucho calor".
"Los señaleros y bomberos fueron los primeros que llegaron, a los tres minutos del accidente, y hay que agradecer el esfuerzo sobrehumano que hicieron", señaló.
NO HUBO DEFECTOS DE ORGANIZACIÓN.
Preguntada sobre si hubo defectos de organización, Álvarez dijo que "la ignorancia es muy atrevida", y apuntó que hay unas normas para llevar a cabo el plan de emergencias, que dictan los organismos internacionales, y aseguró que "los bomberos llegaron antes del tiempo previsto". Además, recordó que "la gente no se puede mover libremente por el aeropuerto, hay que coordinarles, por lo que se reúnen en un punto de encuentro y son guiados al punto del accidente".
"Nunca se sabe dónde va a producirse el accidente y hay que tomar muchas decisiones en un corto espacio de tiempo. Quiero agradecer su trabajo, reconocer su valor y darle todos los medios que necesiten y analizar si ha habido algún error", sentenció.
