MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los controladores reunidos en el Hotel Auditorium de Madrid (aproximadamente medio centenar) han comenzado a abandonar "por goteo" la sala en la que permanecían reunidos, donde algunos de ellos todavía siguen concentrados a la espera de la evolución de los acontecimientos, mientras la mayoría ha subido a las habitaciones que tienen reservadas en el citado establecimiento.
Los que salían lo hacían con semblante serio, increpados por algunos pasajeros alojados en el mismo establecimiento próximo a Madrid-Barajas, y sin contestar a las preguntas de los periodistas apostados en las cuatro o cinco salidas, controladas por la policía.
A la pregunta concreta de si pasarán todos la noche en el hotel donde, desde primeras horas de la tarde permanecían reunidos, un controlador dijo que "no".
Miembros de la policía nacional protegían desde las primeras horas de la tarde de ayer la entrada de la sala 'Príncipe Felipe' del hotel, donde estaban reunidos, mientras que fuera se agolpaban una treintena de pasajeros indignados porque habían visto frustrados sus planes de viaje, y que increpaban a los controladores que entraban o salían de dicha sala con gritos como ¡Despido ya!, ¡al paro! o ¡sinvergüenzas!, en un clima de creciente tensión.
