Economía/Transportes.- La UE tratará de acordar el próximo lunes la sede de Galileo, a la que opta Barcelona

Actualizado: viernes, 8 diciembre 2006 17:13

Bruselas cree que no habrá retrasos en el proyecto, cuya entrada en servicio está prevista para 2011

BRUSELAS, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Transporte de la Unión Europea tratarán de acordar el próximo lunes 11 de diciembre la sede del nuevo sistema de radionavegación por satélite Galileo, a la que opta Barcelona junto con otras 10 ciudades: Atenas (Grecia), Bruselas (Bélgica), Cardiff (Reino Unido), Ljubljana (Eslovenia), La Valetta (Malta), Munich (Alemania), Noordwijk (Países Bajos), Praga (República Checa), Roma (Italia) y Estrasburgo (Francia).

La presidencia finlandesa de la UE ha elaborado una tabla comparativa con lo que ofrece cada candidatura, en la que se recoge, por ejemplo, que Barcelona y Atenas están dispuestas a ofrecer gratis el edificio para albergar a Galileo. Pero ha declinado presentar una lista corta con las mejores ofertas y ha recalcado que la decisión tendrá que tomarse por consenso.

El vicepresidente de la Comisión y responsable de Transportes, Jacques Barrot, dijo que el alto número de candidatos "demuestra el interés de los Estados miembros por Galileo", aunque se mostró escéptico sobre la posibilidad de que se pueda lograr un acuerdo ya este lunes y dejó claro que no es una decisión "urgente".

Tampoco quiso pronunciarse sobre si debería darse prioridad a las candidaturas de los países de la ampliación -en este caso Praga, La Valetta tal y como acordaron los jefes de Estado y de Gobierno cuando se hizo el último reparto de agencias en diciembre de 2003.

El Ejecutivo comunitario lanzó este viernes una consulta pública para buscar nuevas aplicaciones del sistema Galileo. Barrot destacó que el mercado mundial de productos y servicios de radionavegación por satélite ascendió a 60.000 millones de euros en 2005. En los últimos 5 años el mercado ha crecido un 25% y en 2020 el volumen de negocios mundial llegará a 300.000 millones de euros, con 3 millones de receptores en servicio y 150.000 nuevos puestos de trabajo creados en la UE.

El primero de los 30 satélites de Galileo se lanzó en diciembre de 2005 y el segundo se enviará al espacio a finales de 2007. Otros 4 satélites estarán ya en órbita a finales de 2009 mientras que los primeros servicios empezarán a comercializarse en 2011. El sistema estará completamente desplegado a principios de 2012. La previsión inicial era firmar el contrato con el consorcio industrial concesionario, formado por 8 empresas, a finales de año, pero el vicepresidente de la Comisión señaló que incluso aunque haya un "pequeño retraso" por la enorme complejidad del contrato, el proyecto va "en la buena vía".

En cuanto a los costes del proyecto, hasta ahora ya se han gastado 1.500 millones de euros de dinero público, a medias entre la UE y la Agencia Espacial Europea, para la fase de desarrollo. Para la fase de despliegue, los 25 han previsto 1.000 millones de euros en el presupuesto comunitario para el periodo 2007-2013, mientras que la iniciativa privada tiene que aportar los dos tercios restantes. Fuentes diplomáticas explicaron que las empresas no quieren poner tanto dinero porque no ven claros los riesgos del proyecto y no han participado en su fase de desarrollo. Durante la fase de explotación, los costes directos serán de 2 millones de euros al año.

VOCACIÓN MUNDIAL

Barrot recordó que Galileo es un sistema con vocación mundial y un número creciente de países participan en el proyecto. En 2004 se firmó un acuerdo con Estados Unidos para garantizar la interoperabilidad con el GPS. También existen acuerdos de cooperación con China, Israel, Ucrania y Corea del Sur. Se han rubricado acuerdos similares con India y Marruecos y se preparan otros con Suiza, Canadá, Australia, Arabia Saudí y Brasil.

El Ejecutivo comunitario insiste en que Galileo presentará dos ventajas respecto al sistema actual, el GPS americano. En primer lugar, al tratarse de un proyecto civil y no militar como el GPS, la señal será continua y garantizada. Además, ofrecerá una precisión de posicionamiento con un error máximo de dos metros, mientras que la del GPS ronda los diez metros.

El vicepresidente de la Comisión subrayó que las tecnologías de radionavegación por satélite "revolucionarán nuestras vidas". Sus aplicaciones rentables se extenderán a muchos ámbitos, desde la gestión segura del transporte (aviación, navegación marítima, por carretera, ferrocarril e incluso peatonal) a la gestión de situaciones de crisis y emergencias, así como aplicaciones en distintos sectores comerciales (agricultura de precisión, seguridad en las transacciones financieras en Internet o transferencia óptima de la electricidad a lo largo de líneas eléctricas).