Con un ratio de seguridad del 0,16 por millón de pasajeros, frente al 0,30% del avión
MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un total de 16 personas murieron en accidentes marítimos entre 2005 y 2010, según se desprende de un informe realizado por la revista especializada en cruceros Cruises News Media Group, con datos de GP Wild.
En ese periodo, la industria mundial del crucero transportó un total de 98,2 millones de pasajeros, con una tasa de seguridad en barcos de este tipo en los últimos cinco años del 0,16 por millón de pasajeros.
De los casi 100 millones de pasajeros que viajaron por todo el mundo en barcos de cruceros, un total de 518 pasajeros requirieron asistencia médica por causa de incidente marítimo.
El peor registro en cuanto a número de fallecidos tuvo lugar en 2010, con cinco víctimas mortales, mientras que durante los años 2008 y 2009, donde se transportaron 16,3 millones de pasajeros y 17,6 millones de pasajeros respectivamente, no se produjo ninguna víctima mortal.
Pese al naufragio del 'Costa Concordia' la industria del crucero mantiene un "excelente ratio" de seguridad, por encima del 0,30 por millón de pasajeros (0,000030%) que registra, por ejemplo, la industria aérea.
El citado informe analiza las principales incidencias reportadas por las compañías de cruceros en todo el mundo relacionadas con colisiones, fallos técnicos, incendios, encallamientos, hielo y temporales que tuvieron lugar entre 2005 y 2010.
En la actualidad hay 306 barcos de cruceros activos, que realizan cerca de 112.000 trayectos al año; 23 inactivos y hay 23 barcos bajo pedido cuyas entregas se producirán entre 2012 y 2016.
INDUSTRIA REGULADA.
En cuanto a las medidas de seguridad, todos los barcos de crucero están diseñados y operados de acuerdo con los estrictos requisitos de la Organización Marítima Internacional, la agencia de la ONU que regula los estándares globales para la seguridad y operación de los cruceros a través de la adopción de tratados, reglamentos y resoluciones reflejados en el convenio de seguridad en el mar (SOLAS).
Entre ellas, figuran la obligación de contar con botes salvavidas, balsas salvavidas y chalecos para cada persona de a bordo, así como capacidad adicional.
Los botes salvavidas deben ser capaces de ser cargados, puesto en marcha y maniobrar lejos de la nave dentro de los 30 minutos posteriores a la señal de evacuación del barco.
Además, están obligados a realizar simulacros de seguridad dentro de las 24 horas de embarque y en varios idiomas en su caso. Asimismo, deben contar con instrumentos electrónicos de navegación que ayudan a la correcta navegación del buque.
Si las autoridades de control de un puerto o de otras autoridades internacionales encuentran un barco de crucero que viola cualquier regulación o lo considera inseguro en modo alguno, la guardia costera local, capitán del puerto o la autoridad reguladora local puede impedir el embarque del pasaje o la salida hasta que esas deficiencias sean corregidas.
