MADRID, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
Más de 450 representantes de diez países participarán en las primeras Olimpiadas Internacionales del Voluntariado, que se celebrarán del 17 al 26 de agosto en Chinchilla de Montearagón (Albacete), organizadas por el Centro de Estudios Olímpicos de Chinchilla y la Escuela del Deporte con Corazón con el objetivo de recuperar el primigenio espíritu olímpico y la labor pedagógica del deporte, según los organizadores.
En concreto, la localidad albaceteña congregará a participantes procedentes de Brasil, Bolivia, Rusia, Israel, Rumanía, Hungría, Ucrania, República Checa y España, que competirán en pruebas de atletismo, natación, gimnasia, tiro con arco, ajedrez, fútbol sala y voleibol que se celebrarán gracias al trabajo de más de un centenar de voluntarios.
Según ha explicado a Europa Press el director internacional de la Escuela del Deporte con Corazón, Francisco Iglesias, este evento surge en colaboración con la Real Academia Olímpica Española con el objetivo de recuperar "las ideas del olimpismo de no discriminación, de usar el deporte como una herramienta de valores positivos y de búsqueda de la paz", como preconizaba Pierre de Coubertin, el fundador de los Juegos Olímpicos Modernos.
"El deporte es neutro. Se puede usar para hacer mejores a las personas, o para otras cosas", apostilla Iglesias para reivindicar la fuerza del deporte para unir a las personas, como demuestra el apoyo del Ayuntamiento de Chinchilla a las diferentes competiciones que han organizado en la localidad desde 2010. "Y eso que el equipo de Gobierno ha cambiado, pero la capacidad de unión es espectacular", subraya.
Para esta primera edición de las Olimpiadas Internacionales del Voluntariado, los organizadores hicieron un llamamiento desde las redes sociales a la participación desde otros países que tuvo su repercusión. "Nos comenzaron a escribir diferentes personas que pertenecían a organizaciones, sobre todo ONG, o que realizaban voluntariado por su cuenta para participar", explica Iglesias.
DEL BOSQUE COMO INVITADO
De este modo, delegaciones de diez países se congregarán en Chinchilla para celebrar unas Olimpiadas "como en la antigua Grecia" y compitiendo en el sentido etimológico de la palabra atleta, que según Iglesias significa "el que lucha", y donde la ética del deporte prevalece sobre las medallas y las marcas.
Muestra de ello es que las Olimpiadas tendrán una "pretemporada" del 17 al 21 de agosto donde los participantes prepararán en Chinchilla sus pruebas, pero también asistirán a debates y clases sobre temas como "Espíritu olímpico", "Música y gimnasia", "Ética y moral en el deporte", "Valores olímpicos actuales" y "La relación entre la dignidad y la Areté".
De este modo, las pruebas deportivas se concentrarán del 22 al 26 de agosto gracias al trabajo voluntario de más de un centenar de personas que realizarán labores de organización o traducción, formarán los equipos médicos, así como de masajistas y fisioterapeutas, o cocinarán para todos los participantes. Además, las Olimpiadas tendrán un invitado especial para su ceremonia de clausura: el exseleccionador de fútbol Vicente del Bosque.
