Actualizado 03/05/2013 16:23

Amnistía Internacional denuncia que al menos 36 periodistas han sido asesinados en Siria desde que comenzó el conflicto


MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado, coincidiendo con el Día Mundial de la Libertad de Prensa, que al menos 36 personas han sido asesinados desde que comenzó el conflicto en Siria y decenas de ellos, que informan sobre abusos contra los derechos humanos en el país, han sido arrestados arbitrariamente, detenidos, sometidos a desaparición forzada o torturados.

Estos abusos han sido cometidos por las autoridades y los grupos armados de oposición de Siria, y han convertido a este país en un lugar peligroso para el trabajo de los periodistas, según ha el informe 'Matar al mensajero: Los periodistas, en el punto de mira de todas las partes en el conflicto de

Siria' de AI.

Uno de los periodistas atacados es el escritor y periodista palestino Salameh Kaileh, detenido el 24 de abril de 2012 por los servicios de inteligencia de la Fuerza Aérea tras criticar la nueva Constitución.

Kaileh fue llevado a un centro de detención de Damasco, donde le obligaron a quedarse en ropa interior en una habitación en la que había 35 hombres. Según dijo a Amnistía Internacional, le vendaron los ojos y le aplicaron la tortura conocida como falaqa (golpes en las plantas de los pies). Fue torturado incluso cuando lo trasladaron a un hospital antes de dejarlo al fin en libertad y expulsarlo a Jordania.

Otro caso es el del presentador de la televisión estatal Mohammed al-Sa'eed, que según los informes fue secuestrado de su domicilio de Damasco en julio de 2012 y ejecutado de forma sumaria por Jabhat Al-Nusra, grupo islamista armado de oposición.

"Una vez más, hemos documentado cómo todas las partes en este conflicto violan las leyes de la guerra, aunque la magnitud de los abusos de las fuerzas gubernamentales sigue siendo mucho mayor", ha afirmado Ann Harrison, directora adjunta del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.

Por ello, AI ha pedido protección para la población civil a través de 'www.actuaconamnistia.org', con una campaña dirigida al representante de Siria ante Naciones Unidas y al Presidente de la Coalición Nacional de Fuerzas de la Revolución y la oposición siria en la que se les pide que tomen medidas urgentes para proteger a la población civil y a los periodistas.

Las emisoras de televisión, las cadenas de radio y los periódicos independientes llevan décadas sin poder operar libremente en Siria. Las nuevas leyes que aparentemente proporcionaban mayor libertad de expresión "no han mejorado nada la situación en la práctica", según AI.

En 2011, las autoridades sirias intensificaron sus tácticas represivas para impedir la cobertura informativa del levantamiento --por entonces en general pacífico--, introduciendo prácticamente un bloqueo informativo sobre los medios de comunicación generales entre marzo y diciembre.

Las duras restricciones impuestas a los medios de comunicación generales han hecho florecer el periodismo ciudadano: personas que no son periodistas profesionales publican información sobre el conflicto en las redes sociales. Muchos de ellos arriesgan su vida para garantizar que la información sobre lo que ocurre dentro del país sale al mundo exterior. Como los periodistas profesionales, este colectivo ha sufrido represalias para impedirles desarrollar su labor.

"Llevamos más de dos años pidiendo a la comunidad internacional que tome medidas significativas para garantizar que los responsables de todas las partes en el conflicto rinden cuentas por los delitos de derecho internacional y otros abusos y que las víctimas reciben reparación, pero el pueblo sirio aún está esperando", se ha lamentado Ann Harrison.