MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
España mandará a Malí una segunda sección de una treintena de efectivos para garantizar la seguridad del campamento de entrenamiento que la Unión Europea ha establecido en Koulikoro y se turnará con Bélgica para ponerse al frente de la seguridad de las tareas de formación que llevan a cabo los militares europeos, han informado a Europa Press fuentes de Defensa.
Los nuevos efectivos se incorporarán en las próximas semanas a la Misión de Entrenamiento de la UE para Malí (EUTM Malí), en la que en la actualidad participan una sección de fuerza de protección procedente de la Legión y una quincena de formadores del Mando de Operaciones Especiales, que instruyen en esta materia a los militares malienses.
Las discusiones entre los socios de la Unión Europea que participan en esta misión para la segunda rotación contemplaban la posibilidad de que España enviara una o dos secciones más de militares de fuerza de protección.
Finalmente, según han indicado las fuentes consultadas, la fuerza de protección a partir del 1 de julio estará integrada por dos secciones españolas y dos belgas y ambos países se turnarán para estar al frente del mando de esta tarea. Si España hubiera asumido tres secciones habría estado al frente de manera permanente.
LA BRIPAC, A MALI
Los cambios en la segunda rotación afectarán también a las labores de instrucción que llevan a cabo los militares españoles. Si en los primeros meses se han hecho cargo de operaciones especiales, a partir de julio lo harán en artillería. Para ello, según han indicado a Europa Press fuentes militares, se desplazarán a Malí efectivos del Grupo de Artillería de la Brigada Paracaidista, con sede en Paracuellos.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, deberá acudir al Congreso de los Diputados para pedir el apoyo a esta ampliación de la participación española, ya que el Gobierno acordó en enero, y la Cámara Baja así lo ratificó, que España contribuyera a la EUTM Malí con medio centenar de efectivos, que se verán superados con la segunda sección de protección.
NUEVO AVIÓN EN EL DESTACAMENTO MARFIL
Mientras tanto, en el destacamento Marfil, el primero que llegó a la región para apoyar los esfuerzos de Francia para frenar el avance de los radicales islamistas en el norte de Malí, ha vivido esta semana el relevo de su avión de transporte.
En concreto, el avión 'Hércules C-130' ha sido sustituido por un avión C-295 del Ejército del Aire, que se encuentra en Dakar, donde tiene su base este destacamento, desde ayer. Con él viajaron seis miembros del Ala 35 del Ejército del Aire, que se suman a los cuatro que habían llegado el lunes.
El despliegue de su personal finalizará con la llegada hoy de otros 14 miembros que completan la dotación de un total de 24 militares. El contingente en Dakar se reducirá así de 51 miembros a 47, una vez concluya el relevo total de las dos aeronaves el próximo 31 de mayo.
Hasta entonces los pilotos del Ala 35 realizarán vuelos de familiarización en zona acompañando a las tripulaciones del 'Hércules' para conocer el tipo de misiones encomendadas a España dentro del apoyo prestado a la 'Operación Serval' francesa y a la Misión Internacional de Apoyo a Malí con Liderazgo Africano (AFISMA).
Con una capacidad de transporte algo menor que el C-130, el C-295 ha participado ya en numerosas operaciones internacionales, entre las que destacan las misiones en Afganistán, Líbano y Chad.
