Actualizado 14/01/2010 17:42

Haití.- La familia de la religiosa navarra desaparecida en Haití se aferra a la esperanza de que creer que está con vida

La hermana de Pilar Pascual recibió anoche una llamada que le decía que había visto a la religiosa junto a otros enfermos


PAMPLONA, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

La familia de la monja de Falces María Pilar Pascual, enfermera de 65 años de la que todavía no se tienen noticias tras el terremoto que ha asolado Haití, continúa sin noticias de la religiosa desaparecida aunque se aferra a la esperanza de creer que ésta se encuentra con vida.

En declaraciones a Europa Press, Mari Cruz Pascual, una de las dos hermanas de la religiosa, aseguró que todavía continúan sin noticias de Pilar, aunque se muestra esperanzada de que ésta se encuentre viva después de que anoche recibiese la llamada de una monja madrileña cuya hermana, también religiosa, se encontraba en Puerto Rico y le dijo que le "pareció haber visto a Pilar y a sus compañeras en la tele junto a otros heridos".

No obstante, y aunque Mari Cruz Pascual reconoce que esta llamada le "tranquilizó", es consciente de que puede que no sea cierta la información que recibió. "Pienso que estará bien y trabajando mucho, pero mientras no oiga su voz...", se lamentó.

Así, Mari Cruz reconoció encontrarse "fatal", algo aturdida por todo lo que está sucediendo y por la información que le llega desde los medios de comunicación, sabiendo que "no queda otro remedio que esperar". "Estoy bloqueada, pegada al teléfono que está todo el día sin parar de sonar", aunque "nadie" se ha puesto en contacto con ella.

Religiosa "de toda la vida", Pilar "se marchó a los 15 años de casa y ya no ha vuelto", reconoce su hermana. Enfermera de 65 años, lleva 33 viviendo en el país caribeño y la última vez que Mari Cruz habló con ella fue el 7 de enero para preguntarle cómo habían ido las Navidades.

A la hora de definir el carácter y la personalidad de su hermana, Mari Cruz -nueve años mayor que la religiosa-, lo tiene claro. "Es una persona alegre, muy trabajadora, amante de los pobres y de su familia. Le aprecia todo el mundo".

La última vez que Pilar Pascual estuvo en el municipio navarro fue el pasado mes de julio y permaneció hasta septiembre junto a sus dos hermanas: Mari Cruz y María Josefa. "Suele venir cada tres años y pasa tres meses en el pueblo".

"MUY QUERIDA" EN FALCES

En algunas de estas estancias en el municipio navarro, Pilar ha aprovechado para recaudar donativos que luego llevaba hasta Haití. Así lo reconoció el alcalde de Falces, José Carlos García, quien en declaraciones a Europa Press recordó que el pasado año se prepararon una serie de actos con un instituto de Marcilla para recaudar "una cantidad importante de dinero" que se le entregó a la religiosa para desarrollar proyectos en el país caribeño.

García indicó que se creó una especie de mercadillo por el que se recaudaron "cerca de 3.000 euros". "Todos los años colaboramos con ella. Es muy conocida y la gente le quiere mucho en el pueblo. Recuerdo cuando le pregunté qué necesitaba y me dijo que lo que necesitaba era leche en polvo porque la gente se estaba muriendo de hambre, con que no quiero ni pensar cómo tiene que estar ahora esa gente", manifestó.

DESDE ZARAGOZA

Una hermana de Hijas de la Caridad en Zaragoza, a la que pertenece Pilar Pascual, también manifestó que no tienen noticias nuevas sobre el estado de la monja navarra. Según relató a Europa Press, en un primer momento desde la central de esta comunidad religiosa en París se les comunicó que las hermanas que residen en Haití, un total de 36 de las que ocho son españolas, "estaban bien pero que los edificios se habían caído".

Sin embargo, añadió, en una "pequeña comunicación ayer a través de una agencia, que fue muy confusa, se deducía que alguna de las hermanas estaba herida". "No hemos recibido más comunicaciones", añadió la hermana Soledad García.

En cualquier caso, barajan la posibilidad de que Pilar Pascual estuviera en Puerto Rico, junto a otra hermana española, por cuestiones de salud, "ya que va periódicamente a revisiones". "Lo que es seguro es que sor María Teresa, la responsable de la zona, que es de Burgos, estaba en Puerto Rico y nos dijeron desde París que estaba con otra hermana", relató. Tampoco después han podido contactar con ambas.

Soledad García mostró su "pena" por todo lo ocurrido en Haití, "donde tenemos obras para gente muy necesitada". "Estamos preocupadas", dijo, y a la espera de noticias sobre el estado de las hermanas.