Actualizado 13/08/2010 19:30

Naciones Unidas expresa su preocupación por la propagación enfermedades en los campos de refugiados en Darfur


NUEVA YORK, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -

Más de 100.000 personas corren peligro de exponerse a un brote de enfermedades infecciosas, como la malaria, en los abarrotados campos de refugiados de Darfur, como resultado del prolongado conflicto en la zona.

De momento, las ONG siguen esperando autorización para entrar en áreas como el campo de desplazados de Kalma, donde millares de refugiados están concentrados a la espera de la presencia de la misión híbrida de Naciones Unidas y la Unión Africana (UNAMID).

Precisamente este campamento carece de las instalaciones básicas para proporcionar cuidados médicos. Éstas, precisamente, se encuentran concentradas en la cercana Nyala (Darfur del Sur), paralizadas a la espera de entrar en las zonas más directamente afectadas.

La UNAMID, por su parte, ha expresado su preocupación por la posiblidad de que enfermedades infecciosas como la malaria puedan hacer acto de presencia en el campamento a consecuencia de las fuertes lluvias en la región, junto con las aguas estancadas y la falta de cobijo y a la ausencia de protección contra las picaduras de mosquitos, transmisores de enfermedades.

De igual modo, los cooperantes son incapaces de distribuir las raciones de alimentos necesarias para que la población sobreviva en condiciones a lo largo de este mes de agosto.

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