MADRID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) afirmó este martes que el número de paquistaníes directamente afectados por las inundaciones casi ha llegado ya a los 21 millones de personas, mientras que la cifra de muertos asciende a los 1.752 y la de casas destruidas o dañadas llega a los 1,8 millones.
Sólo en la provincia de Sindh, en el sur y una de las más afectadas, casi siete millones de personas se han visto afectadas, de las que 1,3 millones permanecen ahora en campamentos gubernamentales. Las inundaciones siguen atravesando el distrito de Dadu, en esta provincia, después de que hace escasos tres días las autoridades emitieran una advertencia de evacuación a 400.000 personas en la ciudad de Mehar y las zonas circundantes.
Las inundaciones amenazan ahora al menos a 110.000 residentes de dos ciudades, mientras que la ciudad de Dadu, con 200.000 habitantes, está aislada en su zona norte.
La división de previsión de inundaciones del Departamento Meteorológico de Pakistán informa de que los niveles del río Indo a la altura de Kotri probablemente desciendan al nivel "muy alto".
Respecto a las diferentes necesidades, la OCHA informa de que persisten en prácticamente todos los campos. Respecto a las relacionadas con la protección, indica que las últimas evaluaciones confirman la existencia de violencia sexual y en base al género, la existencia de discriminación durante las distribuciones de ayuda, la falta de datos sobre los grupos vulnerables y la falta de asistencia para los mismos.
En lo que concierne a los problemas sanitarios, esta agencia de la ONU subraya que las mujeres y los niños, en todos los distritos afectados por las inundaciones, especialmente Sindh y Punjab, siguen requiriendo cuidado médico de emergencia para impedir que contraigan enfermedades que se transmiten por el agua.
Además, señala que hay grandes necesidades de suministros de medicamentos, vacunas y para la reconstrucción de las instalaciones sanitarias. La diarrea aguda, las infecciones respiratorias agudas, las enfermedades cutáneas y la malaria siguen siendo las causas principales de las consultas médicas en los distritos afectados.
