Actualizado 05/06/2019 20:55

Fundación Alimentum y FESBAL piden "desestacionalizar" la donación de alimentos y que se amplíe más allá de Navidad

Fundación Alimentum y FESBAL piden "desestacionalizar" la donación de alimentos y que se amplíe más allá de Navidad
EUROPA PRESS

Las empresas que conforman la Fundación Alimentum donan 200.000 kilos a FESBAL por el Día de la Alimentación Solidaria, este 8 de junio

MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Alimentum ha realizado una donación extraordinaria de 200.000 kilos de alimentos y bebidas a los 55 bancos que conforman la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), con motivo del Día de la Alimentación Solidaria (DAS), que se celebra este sábado 8 de junio, una iniciativa puesta en marcha por ambas entidades en 2015 para "desestacionalizar" la ayuda y sensibilizar a sociedad y empresas acerca del desabastecimiento que sufren los bancos de alimentos durante el verano.

Así lo ha explicado la directora de la Fundación Alimentum, María Del Hoyo-Solórzano, en un encuentro con los medios, en el que ha destacado que esta donación se suma a las que realizan las 25 empresas que conforman la Fundación Alimentum durante todo el año a los bancos de alimentos y ha resaltado la importancia de FESBAL como "pieza clave en la ayuda a un total de 7.402 entidades en España" a través de sus 'operaciones kilo' y 'La Gran Recogida de Alimentos'.

Asimismo, ha indicado que, en 2018, las donaciones anuales de las empresas de Alimentum superaron los ocho millones de kilos, lo que se traduce en más de 40 millones de raciones de comida, así como que los bancos de alimentos entregaron 151.645.441 kilos de alimentos a diferentes organizaciones dedicadas al abastecimiento de personas sin recursos.

En este sentido, ha advertido de la necesidad de mantener la "misma solidaridad y generosidad de las campañas de navidad" durante el resto del año, al tiempo que ha indicado que las necesidades de las familias aumentan en la época estival debido al cierre de los comedores escolares y sociales y a la llegada de un mayor número de personas extranjeras.

Por otra parte, en esta edición, el DAS ha puesto el foco en la importancia de las organizaciones intermediarias que llevan a cabo la distribución de los alimentos con el fin de que lleguen hasta la mesa de personas en situación de vulnerabilidad, encargándose del cotrol y la gestión de las provisiones disponibles, entre otros aspectos.

De esta manera, el director general de FESBAL, Miguel Fernández, ha pedido a las empresas que se unan a esta acción social para garantizar el abastecimiento de las personas sin recursos a través de la ayuda que prestan los bancos de alimentos a las organizaciones encargadas de distribuirlos, como los comedores sociales, escolares, ONG y hogares de pensionistas.

En este sentido, ha indicado que, en 2018, España se situó a la cabeza de los países más generosos de Europa a la hora de donar alimentos y ha destacado la necesidad de "contagiar este nivel de compromiso a las empresas".

En este sentido, ambas organizaciones han resaltado que se ha producido una descenso en el número de donaciones corporativas debido a que, a su juicio, las políticas de Responsabilidad Social Corporativa de las empresas se centran en la sostenibilidad y el medio ambiente y prestan cada vez menos atención al área social y de solidaridad vinculada con la alimentación.

EL COMEDOR SOCIAL MARÍA INMACULADA, EL MÁS ANTIGUO DE MADRID

Por otra parte, FESBAL y Fundación Alimentum han destacado la labor que realiza el Comedor Social María Inmaculada Hijas de la Caridad, el más antiguo de Madrid, que lleva 103 años en activo y abre todos los días del año, beneficiando en 2018 a 2.262 personas, de los cuales 218 eran menores de edad, y repartiendo 151.656 raciones de comida.

En este sentido, la directora del Programa Integral Vicente de Paúl-Hijas de la Caridad y responsable del comedor social, Josefa Pérez, ha explicado que en él se atiende a más de 500 personas al día, siendo julio y agosto los meses en los que más aumenta la demanda.

Asimismo, ha señalado que además de familias, acuden especialmente hombres de entre 45 y 50 años de edad que no encontraron trabajo tras la crisis, así como personas extranjeras con estudios y formación.

"Hablamos de inmigrantes cuando las personas vienen sin dinero. Es la falta de recursos lo que nos hace diferentes entre nosotros", ha apostillado.

Así, Pérez ha destacado que el comedor entrega a partir de las 11.45 horas tuppers de comida a las familias, ya que los menores de edad no pueden acudir a los comedores sociales, y que a las 12.00 horas se abre el turno de comida para los mayores de 18 años. En este sentido, ha comentado que la institución cuenta con una trabajadora social que se encarga de controlar la situación de los más pequeños.

Por otra parte, ha asegurado que la organización del comedor tiene como objetivo evitar que las personas que acuden se avergüencen de ello, ya que, a su juicio, ser pobre "no es una vergüenza, es una circunstancia que muchas veces se da porque la sociedad está mal distribuida".

Peréz también ha recordado que el comedor es un centro de día que permite a las personas que lo necesiten empadronarse allí para "ser ciudadanos de Madrid y poder beneficiarse de las ayudas sociales", así como realizar actividades y acudir a charlas informativas.

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