BARCELONA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Urbana desalojó esta mañana una casa del barrio del Poblenou de Barcelona en la que vivía una mujer con sus nueve hijos, según confirmó a Europa Press un testigo presencial. La madre ocupaba ilegalmente la vivienda desde hace unos diez años.
Según explicó otro testigo, unos 15 agentes entraron en la casa pasadas las 9 horas para sacar las pertenencias de la mujer a la calle. Ésta y varios de sus hijos se resistían a salir, mientras desde el exterior una veintena de vecinos mostraban su apoyo.
Los que le apoyaban, que no se pudieron acercar a la casa porque la Guardia Urbana cortó la calle, coreaban algunos insultos y consignas como que 'están echando del barrio a gente honrada', 'hacen marchar a los vecinos del barrio de toda la vida' y 'sinvergüenzas'.
Finalmente la mujer y sus hijos abandonaron la casa, en el número 28 de la calle Sant Francesc, y les cargaron sus pertenencias en un camión de mudanzas. Su abogado considera que el desalojo no es procedente porque no se trata de un solar de propiedad municipal.
Fuentes municipales afirmaron a Europa Press que la familia "sabía que tenía que irse desde hacía dos años", ya que la finca tiene que ser derribada por un proyecto de reparcelación, pero "no tiene derecho a realojo" porque ocupó ilegalmente la casa.
Durante varios años el Ayuntamiento no supo que la familia habitaba en la vivienda y los propietarios originales tampoco lo denunciaron. La finca pasó después a manos de tres promotores y pequeños socios, según señaló la inquilina, Agustina de los Ángeles, en declaraciones a los periodistas.
Tras unos cuatro años de haberla ocupado, acudió uno de los promotores y le aseguró que podían estar en la casa "tranquilamente", afirmó la inquilina.
El Ayuntamiento fue la semana pasada sin una orden judicial para desalojarla y ofrecerle el apoyo de los servicios sociales municipales, porque siete de sus nueve hijos son menores de edad. Entonces le ofrecieron 5.800 euros y ayuda para buscar un piso de alquiler.
No obstante, había gente que le apoyaba, lo que le hizo "hacerse fuerte con ellos" y rechazar la solución del consistorio, según las mismas fuentes municipales, que hoy le ofrecieron, además del dinero y la ayuda de servicios sociales, realojar a la familia al menos tres días en una pensión, como es de costumbre en casos similares.
De los Ángeles reclamó otra salida, ya que "sólo tres días en una pensión no es una solución", y amenazó en realojarse muy cerca y no aceptar la pensión que le ofrece el Ayuntamiento. "Ahí al lado me voy a poner", advirtió.
