VALLADOLID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Neurovida celebrará este sábado, 2 de febrero, una cena benéfica y una rifa solidaria en el hotel Foxa de Valladolid, donde, con la presencia del humorista Leo Harlem, se tratará de recaudar fondos que se destinarán a nuevos proyectos de ayuda a personas con daños cerebrales.
En concreto, según han informado a Europa Press fuentes de la organización, las aportaciones de los asistentes a la cena servirán para conseguir implantar en la Fundación una Cámara Hiperbárica (oxigenación hiperbárica), que permitirá desarrollar un tratamiento pionero en Castilla y León que mejorará la calidad de vida de quienes padezcan diferentes tipos de dolencias neuronales.
Harlem no será el único interesado en prestar su apoyo solidario a Neurovida, ya que más de 30 empresas solidarias colaborarán también en el evento mediante la donación de regalos que se sortearán entre los asistentes a la cena. Para acceder a ésta, las entradas ya se pueden adquirir a un precio de 40 euros en info@fundacionneurovida.org y en los teléfonos 665 519 856 y 979 184 248.
La Fundación Neurovida es una entidad sin ánimo de lucro formada por afectados, familiares y profesionales que ofrece una opción de rehabilitación multidisciplinar a personas afectadas por daño cerebral. Su objetivo es la rehabilitación, apoyo e integración social de esas personas, al objeto de fomentar su independencia personal, su autoestima y la mejora de su calidad de vida.
"Con la creación de la Fundación queremos llegar a todas las familias de personas con lesiones cerebrales y poner a su disposición información de todos los tratamientos nacionales e internacionales, nuestra ayuda y nuestra capacidad para unir esfuerzos", han asegurado miembros de la agrupación, que tiene como "principal meta" acercar a las personas afectadas a terapias que actualmente no existen en España, pero que en otros países están dando buenos resultados.
Respecto a esta último punto, actualmente se trabaja con el 'Método Therasuit'. La base del traje Therasuit se inventó en Rusia durante la era espacial y fue pensada para combatir los efectos negativos (atrofias musculares, osteoporosis) que sufrían los astronautas durante los viajes espaciales.
"En un futuro próximo, con el trabajo de la Fundación y el apoyo de todos nuestros amigos, colaboradores y patrocinadores pretendemos llevar a cabo nuevos proyectos", han asegurado los portavoces de Neurovida en un comunicado.
