Actualizado 17/06/2010 17:33

El ex guardia civil acusado de matar a Mari Luz Posse pide "perdón humilde" y dice que está "totalmente arrepentido"

Familiares y amigos increpan al abogado de la defensa tras decir que era un agente "ejemplar" hasta el crimen


PONTEVEDRA, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ex guardia civil Jaime M.S., acusado de matar a su ex pareja Mari Luz Posse en diciembre de 2007 en el cuartel de Cambados (Pontevedra) donde estaba destinado y al que había acudido la víctima a denunciarlo por acoso, pidió hoy "perdón humilde" y afirmó estar "totalmente arrepentido".

Así lo manifestó en su turno de palabra en la tercera y última sesión del juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Pontevedra, que fue especialmente tensa para el abogado de la defensa, Domingo Estarque, quien insistió varias veces a lo largo de su exposición final en que "todo acusado tiene derecho a una defensa" y pidió "respeto" a su profesión.

Durante la vista, después de escuchar como el abogado argumentaba que hasta el momento del crimen Jaime M.S. era "un guardia civil ejemplar", una familiar de la fallecida se puso en pie y le gritó: "Mi hermana está enterrada en el cementerio", y luego abandonó la sala.

Solo unos minutos después, tras indicar el abogado que Jaime M.S. "pudo huir y no lo hizo", una amiga de Mari Luz se puso en pie y le espetó al letrado: "Váyase a la mierda", tras lo que abandonó también la sala.

Así, algunos familiares y amigos no estuvieron presentes en el último turno de palabra del acusado, quien se encuentra en libertad desde el pasado mes de febrero al no renovársele en plazo la prisión provisional, cuando se puso en pie y pidió "perdón humilde". Además, dijo que estaba "totalmente arrepentido". "La condena no me la pone nadie, me la pongo yo", concluyó.

"PARIPÉ"

Posteriormente, una de las hermanas de la víctima, Isabel Posse, consideró que los llantos con los que terminó la intervención del acusado no fueron más que "un paripé". "Quedó muy bonito, pero real no. ¿Se dirigió acaso a la familia en algún momento? No, se digirió sólo al jurado. Qué se hubiese girado por lo menos y que nos mirase a la cara a la familia. Fueron cuatro lágrimas", sentenció.

El proceso judicial queda pendiente de la deliberación del jurado popular para alcanzar un veredicto, después de que fiscal, acusaciones y defensa dedicaran la mañana a presentar los informes y conclusiones finales.

ATENUANTE RETIRADA

En las alegaciones finales, la fiscal especializada en delitos contra la violencia de género de la Audiencia de Pontevedra, Carmen Novo, retiró la atenuante de embriaguez que había incluido inicialmente, al considerar que los peritos dejaron claro que el ex agente, aunque bebió en las horas previas al crimen, no tenía mermadas sus facultades mentales.

El argumento de embriaguez es el que esgrime la defensa del ex agente para pedir la libre absolución del acusado por una eximente completa o, de no ser aceptada ésta, una pena de cinco años por un delito de homicidio por la atenuante de estar bajo los efectos del alcohol. Por contra, la acusación particular y fiscal reclaman 20 años de cárcel por asesinato, ya que consideran que hubo alevosía y que el crimen se produjo por sorpresa y sin que la víctima se pudiera defender.

La fiscal también aludió en su intervención a una de las lagunas que, según comentó, no se aclararon en el juicio, en relación al hecho de porqué cuando Mari Luz acudió al cuartel de Cambados a denunciar a su ex pareja por acoso, el guardia civil de puertas los dejó unos minutos a solas.

Finalmente, la fiscal de la Audiencia pontevedresa especializada en violencia de género consideró que la "mejor garantía" frente al maltrato es la denuncia.