Actualizado 20/05/2008 16:01

Las gitanas perciben una triple discriminación, por ser mujer, por su etnia y por pertenecer a una cultura patriarcal


MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -

Las gitanas españolas perciben una triple discriminación, por ser mujeres en esta sociedad, por pertenecer a una minoría étnica que recibe la peor valoración social del resto de españoles, y por vivir en una cultura cuyos valores relegan a la mujer al papel de madre y esposa, según un documento presentado esta mañana por la Fundación Secretariado Gitano durante la inauguración del seminario 'Mujeres gitanas y discriminación por género', organizado en el Instituto de la Mujer.

Así, en el texto se explica que las gitanas afrontan, como mujeres, las dificultades de acceso al empleo y las enormes cargas de trabajo doméstico y, como gitanas, una formación más baja que la de los hombres y los prejuicios que tiene la sociedad hacia esta etnia.

A esta situación hay que añadir, además, que "un sector de la propia comunidad gitana ve con desconfianza el acceso de las mujeres a la educación formal y al empleo" y que este grupo relega a la mujer a un papel de esposa y madre.

MOTIVACIÓN CRECIENTE

A pesar de estos obstáculos, agrega el texto, existe "una motivación creciente" para acceder al mercado laboral y para recibir cursos de formación, lo que ha provocado que aumente el número de mujeres gitanas que trabajan y estudian.

Además, en la actualidad hay más espacios de convivencia, como centros de formación, universidades o lugares de trabajo, lo que otorga a las mujeres gitanas "una mayor autonomía al disminuir la dependencia del grupo". En estos lugares también se enfrentan a situaciones que les obligan a "solucionar problemas de forma similar al resto de ciudadanos".

Por todo ello, la Fundación Secretariado Gitano subraya que son necesarios "mecanismos y recursos de apoyo que favorezcan la inclusión de la sociedad gitana y en especial de las mujeres que pertenecen a esta etnia".

CARMEN CALVO APUESTA POR LA LIBERTAD DE LAS GITANAS

Por su parte, la diputada socialista y ex ministra de Cultura Carmen Calvo, que aseguró que ha convivido "desde pequeña" con gitanos, destacó que "toda aquello que afecten a la libertad de la mujer no se puede llamar cultura (gitana)".

Así, Calvo dijo que "estamos construyendo una sociedad sin valores, donde todo se compra o se vende", por lo que apostó "por progresar en valores morales como la igualdad de género".