MARACENA (GRANADA), 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez Rubio, ha abogado por la prevención, la información y la interposición de denuncias para evitar casos como el ocurrido en Asturias, donde dos niñas han sido presuntamente asesinadas por su padre "precisamente para hacer daño a la madre".
Sánchez Rubio, que ha inaugurado en Maracena (Granada) la jornada autonómica 'Intervención y Buenas Prácticas Municipales ante la Violencia de Género en Andalucía', considera "terrible" este caso que "nuevamente nos ha puesto delante de los ojos el drama de esta lacra", lo que a su entender "actualiza más que nunca" esa necesidad de hacernos reflexionar sobre la violencia de género y la búsqueda de los instrumentos necesarios para que estas situaciones no vuelvan a repetirse.
"Para que esta realidad no ocurra en nuestros pueblos y ciudades hay que prevenir, informar, denunciar y buscar ayuda, porque de la violencia de género se sale junto a las familias, los amigos y las redes que las instituciones y la sociedad tienen a disposición de las mujeres" víctimas de violencia de género.
La consejera ha recordado que ya son 46 las mujeres víctimas de la violencia de género en lo que va de año, a las que habría que sumar a estas dos niñas si finalmente se confirma; diez de ellas en Andalucía y muchas son "jóvenes y adolescentes que están sufriendo la violencia de género en primera persona".
Sánchez Rubio ha realizado estas declaraciones en Maracena (Granada), donde ha inaugurado la jornada autonómica 'Intervención y Buenas Prácticas Municipales ante la Violencia de Género en Andalucía', organizada por la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) junto al Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) y el Ayuntamiento de Maracena, y en la que se han analizado las medidas de intervención integral ante la violencia machista desde el ámbito local.
Allí ha destacado que la red de servicios municipales de igualdad "son vitales" para poder garantizar la igualdad de trato en la atención a las mujeres víctimas de violencia de género, que en las zonas rurales utilizan estos servicios como primer recurso cuando necesitan ayuda.
