Actualizado 15/02/2010 14:32

Prisión sin fianza para el detenido por descuartizar a su mujer en Alcover (Tarragona)

Había sido condenado el mismo día a una orden de alejamiento de la víctima por malos tratos


TARRAGONA, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de Instrucción número 3 de Valls ha decretado el ingreso en prisión sin fianza de Domingo Miguel C.P., detenido por matar y descuartizar a su mujer en un piso de Alcover y repartir las partes del cuerpo en diferentes lugares cercanos a la autopista AP-7, según informaron fuentes judiciales.

El detenido había sido arrestado el 5 de febrero por malos tratos y amenazas a la víctima y condenado el 9 de febrero --el día que mató a su mujer-- por un juzgado de Valls a seis meses de prisión --sustituidos por 180 días de trabajos en beneficio de la comunidad--, 16 meses de privación del derecho de tenencia y porte de armas y otros 16 meses de alejamiento de la víctima a más de 500 metros.

Según el auto de prisión, tras la celebración de este juicio rápido, Domingo Miguel C.P. se dirigió a un bar donde consumió un quinto de cerveza y un pincho, y sobre las 15.30 se dirigió al domicilio familiar, donde se encontraba la víctima, Victoria S., de nacionalidad bielorrusa, para "arreglarlo" y dejar sin efecto la orden de alejamiento.

En un forcejeo en la cocina, Domingo Miguel C.P. tiró a la víctima al suelo y cogió un cuchillo de un cajón y se lo clavó dos veces en la espalda, falleciendo poco después. El arrestado trasladó el cuerpo al baño donde la descuartizó, introduciendo los miembros en un bidón y una bolsa.

Domingo Miguel C.P. cogió el coche de la víctima y lo aparcó en la estación de trenes de Tarragona. De regreso al domicilio familiar introdujo el cadáver en su vehículo, abandonando las diferentes partes a lo largo de la AP-7 y el cuchillo en una riera que atraviesa la C-37. Luego, se dirigió a su lugar de trabajo.

Los Mossos d'Esquadra le llamaron la madrugada del 10 de febrero para comunicarle que sus hijos estaban solos, y les comunicó que desconocía donde se hallaba su mujer. Antes de volver al domicilio, acudió a los Mossos de Vic para referirles que tenía una orden de alejamiento y sus hijos se encontraban solos, sin interponer denuncia por la desaparición de la mujer. Domingo Miguel C.P. regresó al domicilio familiar para hacerse cargo de sus hijos.

Tras la localización de restos de sangre en la vivienda y sus incongruencias en la declaración como testigo, Domingo Miguel C.P. confesó ante los Mossos que había matado a su mujer y repartido el cuerpo por diferentes provincias.

El juez decretó la prisión provisional comunicada y sin fianza para el detenido como responsable de un delito de asesinato y de quebrantamiento de condena.