Actualizado 01/03/2013 12:46

HRW pide la libertad "inmediata e incondicional" para las dos integrantes encarceladas de 'Pussy Riot'


MOSCÚ, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

La ONG Human Rights Watch ha pedido este viernes la puesta en libertad "inmediata e incondicional" de las dos integrantes del grupo punk feminista ruso 'Pussy Riot', Nadia Tolokonnikova y Maria Alyokhina, cuando están a punto de cumplir su primer año en la cárcel por una "sentencia injusta", según la organización humanitaria.

Las dos artistas ingresaron en prisión el pasado 2 de marzo de 2012 junto a su compañera Ekaterina Samutsevich tras ser declaradas culpables de un delito de odio contra la doctrina ortodoxa después de organizar un concierto improvisado cerca del altar de la catedral de Cristo el Salvador de Moscú.

Samutsevich obtuvo la libertad condicional en octubre porque nunca había llegado a entrar en la zona de la iglesia, prohibida al público, donde el grupo llevó a cabo sus cuarenta segundos de actuación.

Por su parte, HRW niega este delito de odio y asegura que el grupo se limitó a protestar contra el presidente Vladimir Putin y el Gobierno ruso, lo que convirtió al acto en una protesta política que, según recuerda la organización, está claramente protegida bajo la ley nacional.

"Cada día que estas mujeres han pasado en la cárcel ha sido una injusticia", declaró la subdirectora de HRW para Europa y Asia Central, Rachel Denber, quien enmarcó el caso de las integrantes del grupo como un ejemplo más de un "inconfundible clima de represión" en Rusia. "Las mujeres de 'Pussy Riot' jamás deberían haber sido acusadas de un delito de odio", añadió.

HRW denuncia que la jueza que emitió el veredicto mintió al dictaminar que las tres mujeres "nunca hicieron discurso político alguno" cuando en las letras de su breve canción se pudo escuchar --a través de los vídeos divulgados posteriormente-- "Virgen María, saca a Putin de aquí".

Si bien HRW entiende que la incursión de la banda representó "una conducta abusiva" por parte de las encarceladas, la ONG considera que las autoridades rusas "tenían otras opciones para administrar justicia" sin cárcel.

"El encarcelamiento de las integrantes de 'Pussy Riot' es solo un ejemplo entre muchos de la inconfundible represión contra las críticas al Gobierno y contra la disensión que existe en la Rusia de hoy en día", concluyó Denber.