Actualizado 17/01/2018 18:25

La contratación de personas con discapacidad alcanzó un máximo histórico en 2017 con 110.068 contratos

Discapacitado, discapacidad
FUNDACIÓN ONCE

MADRID, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

La contratación de personas con discapacidad alcanzó un máximo histórico en 2017, cuando la cifra se elevó un 11,4% respecto del año anterior hasta alcanzar los 110.068 contratos, de modo que se cruzó por primera vez la barrera de los 100.000.

Son datos del Ministerio de Empleo que recopila Fundación Adecco en un comunicado en el que destaca atribuye este crecimiento a "una recuperación económica que hasta la fecha, ha sido inclusiva" junto a un "paulatino cambio de mentalidad de las empresas, que comienzan a valorar el talento de la persona por encima de su discapacidad" junto a "nuevas fórmulas como el teletrabajo".

"Asimismo, las propias personas con discapacidad, especialmente las nuevas generaciones, están protagonizando un cambio de paradigma, planteándose un futuro profesional como el de cualquier otro ciudadano y rompiendo la anacrónica creencia que les identifica con inactividad y/o dependencia", apunta el director general de Fundación Adecco, Francisco Mesonero.

Añade otra variable que habría propiciado este aumento: "La nueva legislación de 2013, que unificó la normativa existente en materia de discapacidad, está comenzando a dar sus frutos y demostrando su eficiencia, que se refleja en el incremento de las contrataciones".

En un comunicado, Fundación Adecco destaca además que el 29% de estos contratos (32.391) fueron en el mercado ordinario, un 7,4% más que en 2016, lo que a juicio de Mesonero significa que "las personas con discapacidad van teniendo más participación en entornos de trabajo normalizados".

Con todo, considera "necesario seguir potenciando" esta modalidad profesional pues a su juicio "constituye el fin último de todo proceso de integración al equipararse la persona con discapacidad al resto de los trabajadores y producirse su inclusión de forma plena".

"Son todavía muchas las personas que podrían trabajar y no lo hacen debido a prejuicios y estereotipos (recordemos que su tasa de actividad es del 36%, frente al 59% general). Además, es crucial garantizar que su contratación no obedece exclusivamente a la recuperación económica, sino que es extensible a cualquier coyuntura. Para ello, se antoja necesario potenciar una sensibilización que afiance el cambio de mentalidad que ya está en marcha y que será el único garante de que el empleo de las personas con discapacidad sea sostenible en el tiempo", ha añadido.