CARMONA (SEVILLA), 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
La profesora de Psicología Social de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) María del Carmen Monreal Gimeno aseguró hoy en Carmona (Sevilla), en el marco del curso de verano de la UPO 'Participación social y actividad física para una jubilación con calidad de vida', que los mayores no son capaces de decir "no", especialmente a sus hijos, porque temen quedarse solos, lo que les genera estrés, conflictos emocionales y en definitiva, disminuye su calidad de vida.
En declaraciones a Europa Press, la experta señaló que los mayores tienen que desarrollar habilidades de comunicación que les ayuden a manifestar lo que piensen y a negociar su posición ante un conflicto. Al respecto, Monreal destacó que está demostrado que las habilidades de comunicación están muy relacionadas con la salud, ya que evitan el estrés que producen los problemas emocionales.
Asimismo, la psicóloga social, que impartió la conferencia 'Habilidades de comunicación para prevenir el estrés', explicó que las personas mayores son las más vulnerables a la soledad, ya que en esta etapa de la vida han perdido a muchos amigos y además, tienen que luchar contra los estereotipos y el aislamiento social.
Esta situación, como explicó María del Carmen Monreal, provoca que los mayores se dejen a arrastrar por las decisiones de sus hijos y obligaciones, como el cuidado de sus nietos, anteponiendo esto incluso a su propia vida, "lo cual es un error porque el mayor es una persona activa, con capacidad de organizar su vida y de realizar numerosas actividades y viajes", apostilló la experta.
En este sentido, la sociedad se está dando cuenta cada vez más de la importancia que tienen los mayores en la vida pública, "pues son personas que cuentan con una gran experiencia y pueden aportar sus conocimientos, al margen de que estén jubilados", afirmó Monreal.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los mayores de 65 años representan el 20 por ciento de la población española y este porcentaje, como indicó la profesora de Psicología social de la UPO, se irá incrementando progresivamente, dado que la esperanza de vida ha llegado a alcanzar los 87 años para las mujeres y una edad inferior para los varones.
Por tanto, "con el aumento de la calidad de vida y de la edad, hay que ofrecer una visión positiva de los mayores e integrarlos activamente en la sociedad, como ocurre en otras cultura, donde éstos son respetados y aceptados", concluyó la experta.
