ALICANTE, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a 15 años de prisión a un hombre que mató a golpes a la hija de su pareja, de 21 meses, en La Nucía (Alicante), mientras le cuidaba cuando su madre estaba en el trabajo, el pasado 21 de mayo de 2007. Asimismo, el tribunal establece que el procesado indemnice a los herederos de la fallecida con 120.000 euros y a la Agencia Valenciana de la Salud con 8.029 euros
Los hechos se remontan al 21 de mayo de 2007, cuando José Manuel R.P. se encontraba en su vivienda en La Nucía (Alicante) con la hija de su compañera, que había salido a trabajar. En ese momento el acusado "golpeó con fuerza a la menor en la cabeza, ocasionándole un traumatismo craneoencefálico", por lo que fue llevado por el procesado y unos vecinos hasta el Hospital General de Alicante, donde falleció por parada cardiorespiratoria.
El fiscal pedía para el procesado, en sus conclusiones definitivas, 17 años de prisión por un delito de asesinato, y una indemnización para los herederos de la víctima de 180.000 euros, y para la Agencia Valenciana de la Salud de 8.029 euros. Sin embargo, el tribunal ha condenado a José Manuel R.P. como autor de un delito de asesinato a 15 años de prisión, al considerar que en el delito no concurren circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal, puesto que la "extrema gravedad" del hecho ya se tuvo en cuenta para calificar al suceso de asesinato.
El jurado popular declaró el pasado 10 de marzo culpable al acusado al considerar que las lesiones de la menor eran incompatibles con las ocasionadas por un golpe accidental al caer de la bañera, versión que sostuvo el procesado en la vista.
De esta forma, el jurado estimó como "no probable" que los hechos fueran consecuencia de una "imprudencia", y para llegar a esta conclusión los miembros del jurado consideraron como "clave" la declaración del perito, que indicó que el golpe que causó la muerte de la menor ocasionó "una fractura en la parte de atrás de su cabeza" que es "poco probable" que se originara con una caída desde una bañera, puesto que esa lesión requiere de "cierta intensidad" para producirse.
Por su parte, el acusado, durante su declaración, se declaró inocente, y afirmó que la niña se golpeó "accidentalmente" en la cabeza mientras la lavaba en la bañera. Durante el juicio, el acusado negó los hechos y aseguró que el golpe en la cabeza que causó la muerte a la niña de 21 meses se produjo de forma accidental. El procesado dijo que su pareja le dejó a la niña ese día en su domicilio en La Nucía, mientras ella se iba a trabajar.
Esa mañana, y después de que la niña se despertara, el acusado dio un baño a la menor. Así, José Manuel R.P. aseguró que mientras estaba bañando a niña en una bañera, la dejó "encima de un poyete para coger una toalla" con la que secarla. En ese momento, la niña se deslizó "hacia atrás", y al intentar evitar que cayera, el acusado le dio "más impulso", puesto que se le resbaló "de las manos", por lo que ésta se golpeó en la cabeza con un saliente.
Tras esto, el procesado indicó que la niña se quedó con los ojos "en blanco" y que la llevó al dormitorio para intentar que reaccionara, sin éxito. Después, cogió a la niña y fue a pedirle a su vecino que les llevara hasta el Hospital de La Vila Joiosa (Alicante), donde remitieron al bebé al Hospital de Alicante, centro en el que falleció por una parada cardiorespiratoria.
