El hombre, de 52 años, era vecino de las víctimas
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía ha solicitado imponer un total de 23 años de cárcel a un hombre acusado de presuntamente abusar sexualmente de dos menores en Agüimes, al sureste de Gran Canaria.
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas celebrará este martes (10.00 horas) el juicio contra J.R.R.D., de 52 años de edad y con antecedentes penales computables a efectos de reincidencia, al haber sido condenado por sentencia firme del 28 de abril de 2008 por el Juzgado de lo Penal número 1 de Las Palmas de Gran Canaria a la pena de un año y tres meses de prisión por un delito de abuso sexual, pena que le fue suspendida el día 1 de octubre de 2008 por un plazo de cuatro años.
El Ministerio Público, en su escrito de conclusiones provisionales al que ha tenido acceso Europa Press, señala que el acusado --en prisión provisional por esta causa desde el 20 de marzo de 2009-- era a finales del año 2008 vecino de los menores, uno de ellos de 14 años de edad y otro de 12 años y 10 meses en el momento de los hechos.
SE OFRECIÓ A ARREGLARLE LA BICI
Así, entre noviembre y diciembre de 2008, el procesado, presuntamente "con el propósito de satisfacer sus deseos sexuales y con claro ánimo libidinoso", se ofreció a arreglarle la bicicleta al niño que tenía entonces 14 años. Para ello le invitó a entrar en el garaje de la vivienda del acusado, ubicada en Agüimes.
Tras arreglar el freno de la bicicleta, entró con el chico en una de las habitaciones de la casa y una vez allí puso una película pornográfica y supuestamente obligó al niño a realizar prácticas sexuales. Al finalizar, le dijo que todo era "un secreto" y que no se lo debía contar "a nadie".
Con posterioridad a este episodio, J.R.R.D. volvió a ver en la calle a este chico y le pidió que entrara en la casa. Sin embargo, el niño manifestó su negativa a entrar, pero el acusado "le agarró fuertemente por el brazo y lo introdujo a la fuerza en la vivienda, a donde lo llevó a la misma habitación" en la que habían ocurrido los hechos citados. "Una vez allí y con el mismo propósito libidinoso", presuntamente le obligó a mantener relaciones sexuales, añade el Ministerio Fiscal.
Al terminar y de forma análoga a lo que ya había pasado la primera vez, el acusado le dijo al menor que todo era "un secreto" y le repitió que no se lo dijera a nadie.
En una tercera ocasión, el acusado aprovechó que el mismo niño estaba en la calle jugando con otros pequeños y cuando se quedó solo, salió a la calle junto a su perro y le dijo al menor que le acompañara al lugar denominado 'el Canal', un lugar oculto, donde presuntamente, según el escrito de la Fiscalía, volvió a forzar al chico.
Este menor sufre el llamado síndrome de Klinefertel que afecta a sus capacidades intelectivas, que retrasa su desarrollo cognitivo e intelectivo.
"HACIENDO COMO QUE JUGABA"
Por otro lado, el 24 de enero de 2008, el procesado acudió voluntariamente al domicilio de otro chico para ayudar al padre de éste a lijar las maderas de la vivienda.
En un momento dado, J.R.R.D. aprovechó que el niño, que tenía 12 años y 10 meses de edad, se encontraba a solas en la planta alta de la vivienda para, presuntamente "con la finalidad de satisfacer sus deseos sexuales y con fines libidinosos", tirarlo al suelo, "haciendo como que jugaba, inmovilizarlo", y realizar prácticas sexuales, agrega el escrito.
Por todo ello, la Fiscalía pide para J.R.R.D. un total de 23 años de cárcel por un presunto delito de abusos sexuales continuado, un delito de agresión sexual y otro delito de abusos sexuales. Apunta que concurre en él la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal agravante de reincidencia.
Además, reclama la prohibición de acercarse a menos de un radio de 300 metros y comunicarse por cualquier medio con los dos menores por un plazo de cinco años.
En concepto de responsabilidad civil, exige que J.R.R.D. indemnice a la víctima que tenía entonces 14 años de edad con 4.000 euros y al otro menor con 1.000 euros.
