Ministro Del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba
Ministro Del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba - EP

MADRID, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, no descarta "revisar" el castigo que impone el Código Penal a los menores que cometen crímenes graves, como el perpetrado contra Cristina Martín en Seseña (Toledo), pero se queja de quienes "proponen reformas a la salida de los entierros", en referencia a la propuesta del PP para endurecer la Ley del Menor.

Durante la presentación del balance de accidentes de tráfico de Semana Santa en el Ministerio del Interior, Rubalcaba indicó que "si hay que revisar, --el Código Penal-- se revisa", pero pidió que el debate se aborde con "cierta calma" y "conociendo los datos, no hablando de oídas". "Todo se puede hablar, pero no para regalar los odios a quien sufre, ya sabemos que sufre, pero ese sufrimiento se arregla de otra forma", subrayó.

En este sentido, criticó las declaraciones de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que este lunes en rueda de prensa advirtió sobre un "incremento galopante de la delincuencia juvenil".

"Probablemente la responsable política que dijo que había muchos --delitos graves de menores-- es que estaba pensando en su época", indicó Rubalcaba, quien señaló que asesinatos como el de Seseña son "un hecho excepcional".

LAS CIFRAS VAN "BAJANDO"

Así, apuntó que entre 14 y 16 años el año pasado hubo un homicidio con resultado de muerte, mientras que "si uno se remonta hacia atrás los datos son otros". Concretamente, señaló que en 2000, hubo once asesinatos perpetrados por menores, en el 2001 hubo nueve, en el 2002 hubo cinco. mientras que en 2008 hubo tres y en 2009 hubo uno. "Esto ha ido bajando", subrayó.

Además, puntualizó que las leyes penales que afectan a menores tienen "una voluntad punitiva, pero también, reinsertadora" y dudó que la presunta asesina de Cristina Martín conociera el Código Penal cuando cometió su crimen.

Respecto a la investigación, Rubalcaba reconoció que los encargados del caso "tenían la sensación" cuando se iniciaron las pesquisas de que era un secuestro que "se podía resolver", y ofreció sus condolencias a la familia por lo que calificó de un "asesinato terrible".

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