Publicado 30/07/2019 08:02

Las comunidades étnicas más grandes 'empujan' a los refugiados a encontrar trabajo, según un estudio

Refugiadas sirias que viven en Glasgow, fotografiadas en Edimburgo
Refugiadas sirias que viven en Glasgow, fotografiadas en Edimburgo - Jane Barlow/PA Wire/dpa

   MADRID, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Los enclaves étnicos a menudo se consideran negativos para la integración de los inmigrantes con los nativos en su nuevo país. Pero resulta que estas comunidades pueden ayudar a los refugiados recién llegados a encontrar trabajo, según un nuevo estudio de la Universidad de Stanford (Estados Unidos), que analizó una cohorte de solicitantes de asilo en Suiza.

   Los investigadores del Laboratorio de Políticas de Inmigración de Stanford descubrieron que era más probable que los nuevos refugiados se empleen dentro de sus primeros cinco años si los funcionarios suizos los asignan a vivir en un área con una comunidad más grande de personas que comparten su nacionalidad, etnia o idioma.

   "Nuestro estudio muestra que las redes étnicas pueden ser beneficiosas para la situación económica de los refugiados al menos durante los primeros años de su llegada al país anfitrión", señala Jens Hainmueller, profesor de Ciencias Políticas en Stanford y coautor de la investigación, que se publica este lunes en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences', junto con Linna Martén, investigadora de la Universidad de Uppsala (Suecia), y Dominik Hangartner, profesor asociado de políticas públicas en ETH Zurich en Suiza y codirector del Laboratorio de Políticas de Inmigración, con sucursal en Zurich.

   Los investigadores analizaron datos gubernamentales de 8.590 solicitantes de asilo a los que se les otorgó el estatus de protección temporal cuando llegaron a Suiza entre 2008 y 2013. Los datos también incluyeron cinco años de información sobre cada refugiado, incluso si encontraron empleo y en qué industria.

   En Suiza, los funcionarios de inmigración asignan al azar a cada nuevo refugiado a vivir en uno de los 26 cantones del país. Las preferencias de los refugiados por lo general no se consideran parte del proceso a menos que tengan un familiar que ya viva en un cantón en particular. Además, los nuevos refugiados con estatus de protección temporal no pueden mudarse fuera de su cantón asignado dentro de sus primeros cinco años en Suiza, explica Hainmueller, codirector de la facultad del Laboratorio de Políticas de Inmigración de Stanford.

   El análisis de los datos reveló que no más del 40 por ciento de los refugiados tenían trabajo durante su quinto año en Suiza. Pero aquellos refugiados que fueron asignados a cantones con una red étnica más grande tenían más probabilidades de haber encontrado trabajo.

   Si un grupo de nuevos refugiados fue asignado a un cantón con una gran parte de otras personas de su país, aproximadamente el 20 por ciento de los recién llegados se convirtieron en empleados en los tres años siguientes a la llegada al país. Pero si ese mismo grupo se asentó en un área con una pequeña proporción de conacionales, solo el 14 por ciento de los recién llegados tenía un empleo tres años después.

   "Dado que el empleo de los refugiados es generalmente muy bajo, el aumento del empleo es un efecto importante --recuerda Hainmüller--. Esto es solo una pieza de un rompecabezas más grande sobre lo que ayuda a los refugiados a integrarse dentro de su país anfitrión".

   En los países europeos, muchas personas ven a los enclaves étnicos como resultado de un fallo en la integración de los inmigrantes con los nativos. Pero esas percepciones negativas no están fundamentadas en evidencias, advierte Hainmueller.

   En parte debido a esta preocupación general, los funcionarios de países como Suecia, Dinamarca y Suiza han diseñado políticas para dispersar a los refugiados recién llegados para evitar la creación de enclaves étnicos.

   "Lo que sugiere esta investigación es que esas políticas de dispersión conllevan algunos costos, en términos de que los nuevos refugiados no se benefician de los efectos positivos de las redes étnicas --advierte Hainmueller--. No significa que estas políticas sean generalmente malas, pero sí resalta que existe un beneficio potencial de las redes étnicas geográficamente concentradas que los funcionarios europeos no están capturando".

   En Estados Unidos, las personas que llegan como parte del programa de reasentamiento de refugiados, que incluye una exhaustiva verificación de antecedentes llevada a cabo a través de la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas, están asignadas a vivir en áreas donde hay espacio disponible. A diferencia de algunos países europeos, a los nuevos refugiados se les permite moverse después de su asentamiento inicial.

   "Los funcionarios estadounidenses y el público tienen una visión un poco más positiva de los enclaves étnicos porque los vecindarios étnicos se formaron en la fundación de este país", recuerda Hainmueller.

   El nuevo estudio es parte de un proyecto más grande del Laboratorio de Políticas de Inmigración que pretende examinar cómo el proceso de asilo y su implementación afectan la posterior integración de los refugiados tanto en los Estados Unidos como en Europa.

   "Estamos interesados en muchas opciones diferentes de políticas de asilo, como la ubicación geográfica de los solicitantes de asilo y las reglas que rigen su acceso al mercado laboral --añade Hainmueller--. Hay muchas reglas que afectan a los refugiados y solicitantes de asilo, y no están necesariamente basadas en pruebas sólidas. Nuestra agenda de investigación es tratar de cuantificar los impactos de esas decisiones políticas y señalar el camino hacia políticas que puedan funcionar mejor".