MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha negado la existencia de discrepancias con el PSOE y el Gobierno de Pedro Sánchez sobre las devoluciones sumarias de migrantes, teniendo en cuenta que este jueves el Congreso ha reanudado los trabajos para poner en marcha la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley 'mordaza', una norma aprobada por el PP y que legaliza este tipo de prácticas.
"No tenemos ningún tipo de discrepancia", ha dicho en declaraciones a los periodistas a su salida de la inauguración del VII Congreso del Observatorio contra la Violencia de Género que se celebra en el Senado, tras ser preguntado si tiene discrepancias con el partido y el Ejecutivo por 'las devoluciones en caliente'.
Ante la reanudación de los trabajos en la Cámara Baja, Grande-Marlaska ha afirmado que el Gobierno y el PSOE "trabajan en la derogación de artículos concretos" de esta norma. "Creemos que algunos artículos son de imprescindible derogación por vulneración concreta y efectiva del derecho a reunión, a asociación, al derecho de la información, y todo en consonancia con el recurso de inconstitucionalidad que planteó el grupo socialista a la ley", ha precisado.
En cualquier caso, ha incidido en que "no hay ningún tipo de falta de sintonía, sino todo lo contrario". Grande-Marlaska ha expresado en diversas ocasiones que debe esperarse a la resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que resolverá próximamente sobre el caso de dos subsaharianos expulsados de forma sumaria en 2014 tras saltar la valla de Melilla por el que España fue condenada. Una vez haya resuelto el Tribunal de Estrasburgo, este asunto se abordará en el marco de la reforma de la Ley de Extranjería y no de la Ley de Seguridad Ciudadana, según ha reiterado el ministro.
