Actualizado 24/11/2010 12:32

Aimplas estudia el desarrollo de un envase de plástico para pollo que podrá tirarse a la basura orgánica

Exif_JPEG_PICTURE
EP/NEBOCOMUNICACION

VALENCIA, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS) está desarrollando un envase de plástico biodegradable y pionero para envasar pollo. La gran ventaja del nuevo envase es que podrá tirarse a la basura orgánica, lo que será muy cómodo para el consumidor y beneficioso para el medio ambiente, según ha informado este instituto en un comunicado.

Este proyecto, denominado ECOALIM, será presentando en la Feria Empack Madrid 2010: Salón Profesional del Envase y Embalaje, Almacenaje y Acondicionamiento, que se está desarrollando en Madrid los días 24 y 25 de noviembre.

La coordinadora del proyecto en AIMPLAS, Nuria López, explica que en este momento no existe a nivel comercial ningún envase biodegradable y transparente para envasar el pollo ya que este tipo de carne precisa de unas condiciones de envasado concretas que hoy en día no cumple ningún material biodegradable.

Así, las especiales características de la carne de pollo, que necesita oxigenación una vez envasado para no perder sus propiedades, hace que el plástico en el que vaya envasada la carne deba tener unas características especiales como aguantar el oxigeno en el interior del envase, pero a la vez debe hacer de barrera para que no entre nada de la atmósfera.

Esto es lo que ha provocado que todavía no se haya desarrollado un envase de plástico transparente y biodegradable con estas características. Hoy en día, como explica Nuria López, "se están utilizando materiales multicapa que no son biodegradables y algunos materiales biodegradables tampoco sirven porque no son transparentes o no presentan buena barrera". Sin embargo en este proyecto, "estamos probando con materiales que, además de cumplir los requisitos que necesita el envasado del pollo, son biodegradables".

El nuevo material que está desarrollando AIMPLAS mantendrá las mismas características del plástico que se está utilizando actualmente para envasar pollo, pero añadirá la biodegradabilidad, lo que lo convertirá, "en un material pionero, además de muy cómodo de usar por el usuario porque lo podrá tirar a la basura y además, no será contaminante".

AIMPLAS, perteneciente a REDIT, participa en este nuevo proyecto sobre ecodesarrollo de productos alimentarios junto a AZTI-Tecnalia (coordinador del proyecto), IAT (Instituto Andaluz de Tecnología) y CTAEX (Centro Tecnológico Agroalimentario Extremadura). El estudio, que se encuentra en el segundo año de desarrollo de los tres que durará, ha sido subvencionado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, dentro del Programa Nacional de Proyectos de Investigación Aplicada.

El proyecto ECOALIM surge en un contexto en el que concepto de eco-desarrollo se perfila con un importante crecimiento de la demanda tanto social como tecnológica a corto plazo, debido a una sociedad cada vez más concienciada por el desarrollo sostenible.

La iniciativa busca desarrollar nuevas tecnologías que apoyen el eco-diseño y eco-desarrollo en cuatro aspectos claves en la sostenibilidad de un producto agroalimentario: el aprovechamiento y valorización de residuos agroalimentarios y posible reutilización de los mismos, la reducción del uso de agua en los procesos mediante su reutilización, reciclabilidad y biodegradabilidad de los materiales de envasado, y finalmente, la eficiencia en la cadena de suministro.