Actualizado 14/12/2009 15:33

Copenhague.- Las campanas de la catedral luterana tañeron ayer 350 veces para recordar el nivel máximo de CO2


MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las campanas de la catedral luterana de Copenhague tañeron ayer 350 veces al término del servicio ecuménico, para recordar que ése es el nivel máximo de partículas por millón de CO2 emitidas a la atmósfera que sería necesario respetar para frenar el cambio climático.

Al acto, que fue secundado de forma simultánea por iniciativas similares en numerosos templos de todo el mundo, asistieron la Familia Real danesa, varios miembros del Gobierno, representantes políticos asistentes a la Cumbre del Clima y los integrantes de la representación de Cáritas Internacional.

Este servicio ecuménico se engloba en la agenda de actos en los que está participando Cáritas en la Cumbre de Copenhague y que llevan a cabo en colaboración con la red europea Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Solidaridad (CIDSE), en el marco de la campaña 'Grow Climate Justice'.

Antes de la celebración, los miembros de la delegación de Cáritas-CIDSE acudieron a la plaza del Ayuntamiento de Copenhague, donde el obispo surafricano y premio Nobel de la Paz, Desmond Tutu, entregó al presidente de la Oficina de Naciones Unidas para el Cambio Climático (UNFCCC), Yvo de Boer, un total de 512.894 firmas para reclamar la adopción de acuerdos sostenidos para frenar el cambio climático.

Además, los miembros de la delegación participaron el pasado sábado en la Marcha por la Justicia Climática, en la que recorrieron más de seis kilómetros de distancia hasta el Bella Center, el centro de convenciones donde desarrollan las sesiones de la Cumbre del Clima, según informó la organización en un comunicado. Asimismo, acudieron a la misa por la justicia climática.