Actualizado 08/11/2010 15:47

Un estudio denuncia la "corrupción evidente" en la industria del atún rojo

Liberan por primera vez en la Región de Murcia el exceso de atún rojo enjaulado
EP


MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

Un estudio elaborado por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación ha sacado a la luz una "corrupción evidente" en la industria del atún rojo en donde existe, según han señalado los expertos, una "falta de control de esta pesquería, con numerosos casos de violación de las cuotas, ausencia de declaraciones, uso de vuelos ilegales de apoyo, gran número de capturas de juveniles y casos en los que los propios gobiernos no han declarado las capturas".

Este trabajo se ha realizado tras una investigación de ocho meses en los que se ha seguido día a día la pesquería de atún rojo y su mercado, según ha explicado WWF. El responsable de Pesquerías de esta organización ecologista en España, Raúl García, ha señalado que "este alto nivel de ilegalidades supone que ningún consumidor, empresa o gobierno puede estar seguro de que el atún rojo ha sido capturado y comercializado de manera responsable, ya que toda la cadena está bajo sospecha".

En este sentido, WWF apunta que los datos obtenidos de la Comisión Internacional por la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT, en sus siglas en inglés), han confirmado que ese incumplimiento de las normas de la pesquería de atún rojo del Mediterráneo ha sido una práctica habitual también durante la campaña de 2010.

También desde Greenpeace han mostrado su "preocupación" por este informe. Así, la responsable de Océanos de la organización ecologista, Celia Ojeda, ha señalado que "es más que evidente que la situación de esta especie está fuera de control y los países que la realizan son todos igualmente responsables". Al respecto, Ojeda ha apuntado que "Francia quiere mantener el nivel de la pesquería alegando que genera empleo, en lugar de admitir que la única manera de garantizar estos puestos de trabajo es una reducción masiva de la pesquería, que beneficiará la recuperación de la especie y proporcionará un futuro para estos pescadores".

Tanto para WWF, como para Greenpeace, después de que esta información haya visto la luz, no puede haber una excusa para que la comunidad internacional no suspenda la "destructiva pesquería industrial de cerco" y las granjas de atún que dependen de ella, ante el encuentro de ICCAT, que se celebrará en París del 17 al 27 de noviembre.

Además, Greenpeace ha pedido también al Gobierno español que lidere un cambio en esta gestión en la reunión de ICCAT ya que a su juicio, el Ejecutivo debería priorizar su pesquería tradicional y proteger el sur de las Islas Baleares, zona donde desova el atún rojo.