Actualizado 24/05/2013 15:53

Nuclenor podría pedir una nueva licencia al Ministerio, incluso después de su cierre, previsto para el 6-J

Imagen del exterior de la central nuclear de Santa María de Garoña
PEDRO CANTERO SANCHO, NUCLENOR


MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -

El titular de la central nuclear de Santa María de Garoña, Nuclenor, podría pedir al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, si así lo desea, una licencia nueva de explotación para la planta burgalesa incluso después de que expire la actual, el 6 de julio próximo, ya que a nivel administrativo es posible.

Así, a nivel administrativo y jurídico, una instalación nuclear puede solicitar al Gobierno una nueva licencia y, en ese caso, el Ministerio de Industria tendría que pedir informe sobre esa cuestión al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), de acuerdo con la normativa vigente en esta materia, actualizada en 2008.

El Consejo de Seguridad Nuclear se encarga de la seguridad y la protección radiológica, no sobre el proceso administrativo, que le corresponde al Gobierno, aunque sí puede imponer alguna condición más a la central.

En ese caso, el organismo regulador deberá valorar si la instalación en cuestión, en este caso la planta burgalesa, cumple con todas las condiciones que le impongan y que con los requisitos que establece el reglamento de instalaciones nucleares, así como las exigencias que en ese momento se hayan incorporado.

En función de esto, el CSN emitirá un informe favorable, necesario pero no decisivo porque es preceptivo, o bien desfavorable o negativo, en cuyo caso es preceptivo, pero también vinculante. En todo caso, la autorización final le corresponde al Ministerio de Industria, Energía y Turismo.

Esta situación ya ha sucedido en países como Estados Unidos y Canadá donde hay varias centrales nucleares que han reiniciado su actividad después de permanecer entre 10 y 12 años paradas.

De acuerdo con el reglamento, la solicitud de la autorización de explotación deberá ir acompañada una serie de documentos que "actualizarán, en su caso, el contenido de los presentados al solicitar la autorización de construcción".

En el supuesto de que así lo quisiera, Nuclenor tendría que presentar un estudio de seguridad, con la información necesaria para realizar un análisis de la instalación desde el punto de vista de la seguridad nuclear y la protección radiológica, así como un análisis y evaluación de riesgos derivados del funcionamiento de la instalación, tanto en régimen normal como en condiciones de accidente.

Además, la documentación contendrá descripciones detalladas de las funciones de seguridad, de todos los sistemas de seguridad y de las estructuras, sistemas y componentes relacionados con la seguridad, de sus bases de diseño y de su funcionamiento en todos los estados operativos, incluyendo la parada y las condiciones de accidente.

Entre otros documentos, también deberá incorporar el documento con el reglamento de funcionamiento; las especificaciones técnicas de funcionamiento; el plan de emergencias interior; un programa de pruebas nucleares; un manual de protección radiológica; su plan de gestión de residuos radiactivos y un estudio económico final, así como sus previsiones de desmantelamiento y clausura.

En definitiva, si el Ministerio de Industria, Energía y Turismo decide no acceder a la petición del titular de Garoña --previo informe del CSN-- de revocar parcialmente la orden ministerial de cierre de 29 de junio de 2012 para que le den un año de prórroga sin producir electricidad en el que pudiera solicitar la renovación de su licencia, Nuclenor podría hacerlo más adelante, incluso con la central cerrada.

En todo caso, según han explicado fuentes conocedoras de la cuestión a Europa Press, pese a que la legislación lo permite y a los precedentes en Estados Unidos y Canadá, la continuidad de la central sería más difícil puesto que mantener una planta atómica cerrada, pero en posición de ser reabierta conlleva una serie de inversiones y un alto coste.

Sin embargo, Nuclenor ha pedido hace una semana al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, que revoque parcialmente la orden ministerial de 29 de junio de 2012 y que se le conceda un año, con la central sin producir electricidad, en el que pueda pedir la renovación de la licencia vigente.