Actualizado 23/01/2008 14:35

Un informe alerta de que un "discreto avance" en desarrollo se ha pagado con un coste medioambiental "desorbitado"

VALENCIA, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un informe elaborado por investigadores de la Universitat de València alerta de que "un discreto avance en desarrollo humano y bienestar social" en la Comunitat Valenciana "se ha pagado con un coste desorbitado en presiones e impactos sobre el medio ambiente", según uno de sus autores, Ricardo Almenar.

Almenar recalcó que "el modelo valenciano de expansión de los últimos tiempos" tanto económica como demográficamente, ha sido como el español, pero "extremado". Así, explicó que este modelo ha desplazado el "viejo esquema de que la industria pesada era lo más lesivo" ecológicamente hacia una nueva situación en la que "la construcción, el transporte y el turismo de masas son los agentes que más eclosionan sobre el medio ambiente".

El caso valenciano, a su juicio, es "de libro", es, remarcó, para "citarlo en los manuales" como ejemplo de lo que no se debe hacer porque "es uno de los peores modelos de crecimiento de un país rico en los últimos 20 años".

El investigador indicó en la presentación del estudio, titulado 'La situació del País Valencià 2007. Indicadors i tendencies de desenvolupament social i sostenibilitat ambiental', que en los últimos 10 ó 20 años, la sociedad valenciana ha experimentado "avances indudables" en cuanto a desarrollo humano y bienestar social", pero "discretos, e incluso en algunos terrenos, mediocres" porque, lamentó, no han sido capaces de "cubrir carencias históricas ni de afrontar los nuevos problemas del presente".

De este modo, aseguró que "junto a avances discretos en bienestar social y desarrollo humano se ha producido simultáneamente una caída en los niveles de sostenibilidad ambiental, ya de por sí relativamente débiles hace un par de décadas".

Almenar manifestó que para conseguir un aumento en la esperanza de vida del 5 por ciento y un incremento de poder adquisitivo del 50 por ciento en 2005 respecto a 1985, la economía valenciana requirió incrementar un cien por cien la generación de resíduos sólidos urbanos, un 150 por ciento la descarga de dioxido de carbono, un 200 por cien el empleo de electricidad y un 250 por cien el consumo de cemento.

Con estos datos advirtió de que este modelo a mitad del siglo XXI, daría "cifras absolutamente inmanejables e inviables", por lo que remarcó que "el futuro no puede ser la extrapolación del presente, no podemos seguir por ese camino, porque llegamos a una situación absolutamente insostenible".

LLAMAMIENTO AL DEBATE

El informe es, indicó, "un llamamiento a la desesperada para que se instaure un debate sereno pero profundo en la sociedad valenciana" y apeló a dejar de lado el "mensaje lanzado por los poderes públicos de esta Comunitat de que este es el mejor de los mundos y que ésta es una Comunitat pionera en Europa", porque, manifestó, "nada de eso es cierto", según los indicadores analizados.

Por su parte, el secretario general de CCOO, Joan Sifre, sindicato en cuya sede se presentó el informe, destacó que hace falta "un compromiso público para seguir los indicadores de sostenibilidad y desarrollo", algo que implicaría que la "propia acción de gobierno asumiera claramente" esta actitud.

Sifre subrayó el compromiso "fuerte" del sindicato con esta cuestión, y reclamó un debate público, que calificó de necesario, en relación al impacto del modelo de desarrollo, de producción y consumo sobre el territorio.

Asimismo, insistió en que el estudio refleja "un modelo teórico claramente comprensible que acentúa que estamos ultrapasando los límites que hacen las situaciones claramente irreversibles" en cuanto a la sostenibilidad.

Paralelamente, preguntado sobre si se sumaría al pacto por la vivienda que impulsa UGT-PV, respondió que el sindicato se suma al "debate" sobre esta cuestión y expuso la necesidad de que el modelo de crecimiento basado en la construcción se revise por parte de la "acción proactiva, pública y el compromiso ciudadano" y que no sean los mercados los que tomen la iniciativa.