Actualizado 20/10/2008 15:47

Reducir la contaminación atmosférica en Madrid, Bilbao y Sevilla evitaría unas 3.700 muertes anuales, según Soria

La UE estima que la inversión en políticas de salud relacionadas con el Medio Ambiente multiplicaría por cinco los beneficios


MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, anunció hoy que la existencia de un programa de intervención en contaminación atmosférica que controlara la calidad del aire en Madrid, Bilbao y Sevilla evitaría unas 3.700 muertes anuales en total en estas tres ciudades, según afirmó hoy durante la inauguración de un Simposio de Salud Pública sobre Investigación en Medio Ambiente y Salud y de la Reunión de Alto Nivel sobre Medio Ambiente y Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que comenzó hoy en la sede del Ministerio en Madrid.

Dicho programa, explicó el titular de Sanidad, debería abordar la reducción de velocidad, vehículos y, por tanto, de generación de gases, así como una mayor eficiencia del transporte público, lo que "no solo tiene un impacto en salud, sino también en el número de hospitalizaciones y en el impacto económico que suponen los días de baja laboral".

De hecho, según comentó Soria en declaraciones a los periodistas, en Barcelona ya existe un programa de control de la calidad del aire para que reducir el nivel de contaminación como propone la Unión Europea, con lo que "se reduciría más de 1.200 muertes al año, más de 600 hospitalizaciones, más de 14.000 episodios de bronquitis y de asma, y una reducción en el coste sanitario entre 1.200 y 2.300 millones de euros", aseguró Soria.

Por ello, destacó que el proyecto que está en marcha en Madrid, Bilbao y Sevilla, y cuyos resultados no han sido publicados, podría evitar más de 3.700 muertes anuales si tuviesen un programa de estas características, mientras que el resto de indicadores también se reduciría al mismo nivel que en Barcelona.

En esta y otras iniciativas, Sanidad está trabajando junto con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, que dentro de su Plan de Ahorro Energético tiene el objetivo de reducir el impacto de estas medidas en la salud de los ciudadanos.

"Tenemos tantos ejemplos de cómo la contaminación atmosférica, química, acústica y las variaciones en la temperatura afectan a la carga de enfermedad, que incluso hay evaluaciones de que más del 24 por ciento de la carga de enfermedad se puede relacionar con el Medio Ambiente", aseguró Soria.

En este sentido, Soria, que estuvo acompañado por el director general de Investigación de la Comisión Europea, José Manuel Silva, afirmó que la Unión Europea ha planificado un programa de intervención en Salud y Medio Ambiente con un coste evaluado de unos 7.000 millones de euros para el periodo 2010-2020, que sin embargo generaría una disminución en el gasto sanitario de 42.000 millones de euros. Esto demuestra, según Soria, como "la inversión en políticas de salud relacionadas con Medio Ambiente pueden tener un beneficio de cinco a uno, que multiplica por cinco los beneficios".

LA CRISIS NO AFECTARÁ A ESTAS POLÍTICAS

A este respecto, Silva aseguró que las perspectivas financieras comunitarias son estables y que el presupuesto para este tipo de iniciativas está garantizado hasta 2013, por lo que "el programa está protegido de la crisis económica". "No vamos sacar de un programa de Salud y Medio Ambiente algo para investigar sobre la crisis económica", aseguró.

Es más, Soria volvió a destacar el papel del Sistema Nacional de Salud (SNS) asegurando que "contribuirá a salir de la crisis económica", ya que permite a los ciudadanos "un ahorro que puede dedicarse a otros fines".

Sin embargo, el director regional de OMS-Europa, Marc Danzon, no fue tan optimista y advirtió de que el futuro económico mundial va a tener su influencia en la salud de la población, haciendo especial hincapié en los países menos desarrollados. "España está en una buena situación con respecto al resto de países, donde si se ve con preocupación los posibles efectos de la crisis económica en la salud. Si hay una crisis económica, habrá una crisis de salud".

IMPORTANCIA DE LA INVESTIGACIÓN BIOMÉDICA

Por último, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, destacó la importancia de un acceso igualitario a los avances científicos en materia de salud pública, advirtiendo de que la investigación biomédica es "un buen ejemplo de luces y sombras" del progreso científico y tecnológico a pesar de que, como lamentó, el presupuesto de que disponen para el próximo año "no es el óptimo pero si es eficiente".

"Nuestra responsabilidad social consiste en reconciliar la ciencia con la sociedad y creo que hemos avanzado algunos pasos en esta dirección, pues la ciencia y la tecnología son actualmente componentes decisivos en las agendas políticas para promover el desarrollo socioeconómico de las sociedades más desfavorecidas", declaró Garmendia.