Actualizado 17/03/2010 19:13

Bolonia.- El presidente de la CRUE confía en la "implantación total" del proceso este año, aunque admite "deficiencias"

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la CRUE, Federico Gutiérrez-Solana, confía en que, tal y como prevé el Gobierno, el proceso de adaptación del sistema universitario español al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) esté totalmente implantado este año, aunque admite que existen "deficiencias" por subsanar con una "voluntad de mejora continua".

En una entrevista a Europa Press, el rector destacó la "creciente identificación" de alumnado, profesorado y sociedad en general con los objetivos del Espacio Europeo, "de la forma en que han venido siendo practicados en el Proceso de Bolonia y ahora actualizados de cara a 2020 en la llamada Agenda de Lovaina".

No obstante, advirtió de que, a partir del momento en que se complete el proceso, la sociedad española tendrá que mentalizarse del tránsito a un modelo de evaluación y mejora constante en el que "las acreditaciones universitarias de España se reconocerán en el resto del continente y viceversa".

"Esto significa que hay que mantener, cada día y cada curso, el esfuerzo de la calidad que permite asegurar el reconocimiento y, con ello, la movilidad y las nuevas oportunidades para los jóvenes y también para docentes, investigadores y todo el personal universitario", añadió.

EL RETO, IMPULSAR LA MOVILIDAD

Preguntado acerca de los principales retos que plantea Bolonia al sistema español, Gutiérrez-Solana explicó que, en primer lugar, será necesario completar la oferta de titulaciones adaptadas, para después ajustar, a la vista de las primeras experiencias, la normativa sobre los tres ciclos del nuevo sistema, Grado, Máster y Doctorado.

"Además habrá que dar nuevos impulsos a la movilidad de estudiantes y del profesorado mediante los mecanismos de reconocimiento y, finalmente, mejorar la explicación interna y externa del espacio europeo fomentando la participación de todos los sectores universitarios y de la sociedad de la Agenda de Lovaina de cara a 2020", afirmó.

DIFERENCIAS EUROPEAS "DE RITMO"

Por otra parte, explicó que en la 'Conferencia ministerial sobre la Declaración de Bolonia y las nuevas estructuras de la Educación Superior Europea', celebrada en Budapest y Viena la semana pasada, se comprobó la convergencia de los 47 países en la implantación del grado y del nuevo currículum, "pese a algunas diferencias nacionales de ritmo que deben superarse acelerando la convergencia".

"La marca global 'EEES' ya está funcionando en todo el mundo como una expectativa de calidad académica", aseguró. No obstante, reconoció que es preciso dar protagonismo estudiantil al aprendizaje, orientar el sistema a la inserción laboral e impulsar la movilidad europea de los universitarios y de los futuros profesionales.