BARCELONA, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat de Cataluña, en colaboración con el Ayuntamiento de Sant Boi y la Comisión Catalana de Ayuda al Refugiado, ha acogido a cinco defensores de los derechos humanos, cuyo origen son países donde se vulneran tales derechos, con el doble objetivo de "sensibilizar a la sociedad catalana de esta violación y el intento de incrementar el nivel de seguridad que tienen en su países", según ha asegurado el consejero de Interior, Joan Saura, en su recepción.
"Ya están aquí dos acogidos de Colombia y una de Turquía, y la semana que viene vienen otros dos acogidos de Chechenia y de Honduras" ha explicado Saura. La presencia de los mismo se enmarca en la segunda edición del programa de protección de defensores de los Derechos Humanos que pretende acoger cada año a cinco participantes.
Entre los acogidos a los que el consejero hacía referencia se encuentra Vicente O.C., activista colombiano y periodista, que durante más de 15 años ha sido un destacado dirigente defensor de los derechos de los pueblos indígenas.
Él mismo es un indígena Nasa, y desde 2006 ejerce escribiendo artículos de denuncia por violación de derechos humanos. Fue acusado de terrorismo y encarcelado por el gobierno colombiano, y ha sido declarado objetivo militar y amenazado de muerte, en dos ocasiones, por las FARC.
"Vengo en representación de los países indígenas de Colombia que sufrimos el genocidio tanto de las multinacionales, como los efectos de un conflicto armado que se desarrolla desde hace cuarenta años y de leyes de despojo que ha implementado el gobierno para estos pueblos originarios de Colombia", ha sentenciado el activista.
Para Vicente O.C. la estancia de seis meses supone, además de estar fuera durante un tiempo, "articular trabajos y procesos, y conocer como es la lucha de otros defensores en otros países". "También es una oportunidad que nos dan las autoridades catalanas para evidenciar cada uno de nuestros problemas", ha apuntado.
El periodista Nasa cree que no es fácil hacer visible desde su territorio los problemas que allí acontecen, en cambio, aquí está ante la opinión pública internacional y puede hacer una "denuncia de manera constante", para pedir la alianza de gobiernos y con organizaciones "que defienden la vida en todos los sentidos".
Sobre el hecho de que la estancia tenga una fecha de caducidad y deba volver a su país ha reconocido que salir de su Colombia para hacer lo que hace "es un riesgo". "De alguna manera quien hace alguna denuncia internacional sobre Colombia sabe que al volver tendrá problemas", ha asegurado.
"El reto es seguir denunciando, aunque se incremente el riesgo, porque sabemos que se dejan las bases sentadas de lo que es realmente el conflicto que tiene lugar en nuestro país", ha incidido.
