MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
Empleo, pareja estable y buena salud, son los deseos que las personas con discapacidad piden al nuevo año 2011, según un estudio realizado por la Fundación Adecco.
Así, la fundación ha realizado una encuesta a 415 hombres y mujeres de este colectivo, parados y ocupados, de edades comprendidas entre 18 y 30 años de todas las Comunidades Autónomas con el fin de conocer qué tres deseos le piden al nuevo año.
En ese sentido, el informe señala que la mayoría de los parados con discapacidad pide al nuevo año un trabajo, y aquellos que ya lo tienen, desean por encima de todo conservarlo. Según el director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, "este resultado no es novedoso si se compara con la población general, pues todos atraviesan una etapa laboral complicada y valoran el empleo como el más preciado de los bienes".
Igualmente, ha señalado que para las personas con discapacidad este activo cobra "una importancia aún mayor" porque tienen "mayores dificultades", si cabe, para conseguirlo y porque es "el verdadero vehículo que posibilita su integración social y autorrealización". Además de aquellos relacionados con el empleo, los encuestados han planteado deseos vinculados con la estabilidad emocional o pareja sentimental, salud personal, familia, formación y ayuda concreta al colectivo de personas con discapacidad.
Concretamente, demandan que la palabra minusválido desaparezca del diccionario y que se modifique el nombre de la Ley de Integración Social del Minusválido (LISMI). Asimismo, el 55,4 por ciento declara que su discapacidad le perjudica en la situación laboral.
Por otro lado, subrayan su deseo de encontrar una pareja sentimental debido a que las personas con discapacidad precisan de un apoyo adicional de los que tienen más cerca, y a su vez, tienen temor a ser rechazados. Además, aunque la mayoría de los encuestados ve su futuro con optimismo, un 34,1 por ciento denuncia que las personas con discapacidad no gozan de las mismas oportunidades y no ve factible que la plena integración se produzca en un futuro próximo.
Finalmente, el estudio muestra que el Gobierno es el agente al que las personas con discapacidad exigen mayor responsabilidad para favorecer su integración, seguido de las empresas y los medios de comunicación.
