MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los grupos minoritarios en el Congreso de los Diputados aprovecharon hoy su intervención en el debate sobre el Consejo Europeo de la semana pasada para plantear al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el problema del uso de las lenguas cooficiales en la Unión Europea y el de la inmigración.
El portavoz de ERC, Agustí Cerdá, que consideró que "algunas recomendaciones del Consejo Europeo son positivas si no se convierten en dogmas de fe" y echó en falta "propuestas" en materia de cohesión social, lamentó que durante la cita de la semana pasada en Bruselas "no se trató el tema del plurilingüismo".
Según Cerdá, el Gobierno debería trabajar para defender las lenguas cooficiales en la Unión Europea pero "estamos a punto de finalizar la legislatura y a día de hoy no se puede usar el catalán en el Parlamento Europeo" pese a que hay "otras lenguas que tienen menos hablantes y sí se usan". En este sentido, preguntó a Zapatero "qué piensa hacer" para resolverlo.
Por su parte, el portavoz del BNG, Francisco Rodríguez, consideró "curiosa la capacidad del Gobierno para entrar en conflicto" en la UE por la cuestión energética y el asunto de las OPAs "pero no en otros temas".
En este sentido, consideró que "la UE sigue teniendo un talón de Aquiles" y entre las cuestiones pendientes citó que es "una Unión de Estados sin reconocimiento de los pueblos y naciones" y lamentó que "cada vez es más difícil el respeto por el pluralismo lingüístico y cultural".
Asimismo, Rodríguez pidió a Zapatero que al igual que la canciller alemana, Angela Merkel, que según acudió al Consejo acompañada de los presidentes de los 'lander' (regiones) alemanes, "se presente en Europa acompañado de al menos quince presidentes de Comunidades Autónomas" para dar ejemplo de "política de unidad".
INMIGRACION
Mientras, el portavoz de Coalición Canaria, Luis Mardones, aprovechó para "pedir la máxima sensibilidad a quien concurra" a la cumbre UE-Africa que se celebrará en el segundo semestre bajo presidencia portuguesa.
Mardones pidió que se plantee "el problema de la inmigración clandestina que llega de Africa" a las islas Canarias y pida que "FRONTEX funcione de verdad" y no sólo sea España quien haga frente al problema. Además, reclamó que la cumbre sirva para "buscar soluciones compartidas y solidarias" al problema de la inmigración por parte de los Veintisiete.
En su turno de réplica, Zapatero no hizo mención a las lenguas cooficiales, pero sí a la cumbre UE-Africa. Respecto a esta cuestión, dijo que el Gobierno mantendrá "una estrechísima colaboración con la presidencia portuguesa" sobre todo en la preparación de esta cumbre.
Además, consideró que servirá para "fortalecer las posiciones" que España "ha ido ganando" en los países subsaharianos, principalmente gracias al Plan Africa y los esfuerzos diplomáticos que "están dando resultados".
