MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación afirma que la resolución de los expedientes de adopción iniciados por familias españolas y que están pendientes en Rusia son "una prioridad" y asegura que está trabajando por lograr un convenio con las autoridades de aquel país en la materia.
"La conclusión de los expedientes pendientes es un tema prioritario para el MAEC y tanto desde la Administración General del Estado como desde las Comunidades Autónomas, se está trabajando en esta cuestión", afirma el departamento que dirige José Manuel García Margallo en un mensaje en su cuenta de Facebook.
Según afirma, "las adopciones de menores rusos están sujetas a la legislación interna rusa y por tanto es esa legislación la que se aplica a todos los procesos de adopción en Rusia". No obstante, afirma que seguirá "trabajando con las autoridades rusas para procurar la conclusión de un Convenio de adopción internacional hispano-ruso".
"Todas las familias afectadas por esta situación pueden seguir contando, como hasta ahora, con la implicación de nuestra Embajada en Moscú y Consulados Generales en Rusia", asegura el Ministerio.
Un total de 223 familias catalanas tienen abierto y encallado actualmente un trámite para adoptar a un menor en Rusia, después de que su gobierno prohibiese en julio las adopciones internacionales por parte de familias monoparentales y comenzase a exigir garantías a los países destinatarios de los niños de que éstos no iban a acabar en un futuro bajo tutela de una familia de este tipo.
Según los datos facilitados este martes por la directora del Instituto Catalán de Acogida y Adopción (Icaa), Núria Canal, 96 familias tienen el proceso avanzado y cuentan con un expediente sobre el terreno, y hasta 48 ya cuentan con un menor asignado y están a la espera de que se autorice judicialmente su salida del país.
La Federación Rusa es el principal emisor de menores adoptados en toda España --también en Cataluña--, si bien solo el 0,3% de los casos que se han dado en los últimos 15 años han finalizado en una adopción posterior por parte de una familia monoparental.
