Actualizado 21/05/2014 15:26

La Justicia de Pakistán revisará el próximo martes el caso de la cristiana condenada a muerte Asia Bibi

Representantes de HazteOir.Org hablan sobre la causa de Asia Bibi
EUROPA PRESS

MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Superior de Lahore (Pakistán) revisará el próximo martes 27 de mayo el caso de Asia Bibi, la cristiana condenada a muerte en Pakistán por blasfemia, un delito del que ella se declara inocente. En caso de que la sentencia resulte absolutoria, Bibi tendrá que salir inmediatamente del país --pues corre peligro de ser asesinada-- y podría ser acogida por España.

Así lo han trasladado este miércoles a los periodistas el presidente de HazteOir.org, Ignacio Arsuaga, y el portavoz de la plataforma en defensa de la libertad religiosa MásLibres, Miguel Vidal, tras su regreso de Pakistán, donde han viajado para reunirse con el marido de Bibi y con sus abogados, que tienen esperanzas de que esta vista programada para el martes sea la definitiva.

En estos momentos, el recurso está asignado a una sala del Tribunal Superior de Lahore, después de que varias salas hayan "buscado excusas" para retrasar la vista, probablemente "por miedo a ser asesinados (los jueces) si resuelven a favor de Asia Bibi", según cuenta Arsuaga en base a su conversación con los abogados.

En caso de que se dé la orden de liberación de Asia Bibi, Arsuaga ha asegurado que están en contacto con la Embajada de Pakistán y con el Ministerio de Asuntos Exteriores de España, que muestra su total apoyo para darle asilo, para que pueda ser trasladada hasta el aeropuerto junto a su familia en helicóptero, a ser posible de noche, y de allí hasta el país que la acoja, que a Bibi le gustaría que fuese España.

De esta forma, se le otorgaría un visado de turista sobre la marcha para entrar ese mismo día en el país e incluso se la podría trasladar en un avión privado, según ha precisado Arsuaga. También se tramitaría el asilo político para que pudieran permanecer en España con tranquilidad.

En todo caso, el presidente de HazteOir.org ha indicado que, si la sentencia no fuese absolutoria, tampoco se ejecutaría inmediatamente la sentencia de muerte sino que se podría recurrir a una instancia superior.

Mientras tanto, HazteOir.org, que desde 2010 tiene abierta una campaña por esta causa, anima a los ciudadanos a que sigan firmando la petición de liberación de Asia Bibi a través de la página web 'www.hazteoir.org' que ya cuenta con 27.000 apoyos.

Aunque Arsuaga no ha podido visitar la cárcel de Multan donde ha sido trasladada, ha podido conocer a través de su marido Ashiq, que Bibi se encuentra en una celda de aislamiento, y por lo tanto protegida de posibles ataques, que goza de buena salud y que está esperanzada ante una posible inminente resolución del caso tras cuatro años encarcelada.

LA CONDENA

Asia Bibi fue condenada a muerte por ahorcamiento y a una multa de 300.000 rupias el 8 de noviembre de 2010 por haber hablado del profeta Mahoma, algo que el tribunal consideró una blasfemia. Todo ocurrió un domingo de junio de 2009, cuando, durante un día de trabajo en una cosecha a más de 45 grados de temperatura, Bibi se acercó al pozo a beber agua y utilizó el mismo vaso que empleaban las mujeres musulmanas.

Cuando se disponía a pasar el vaso a otra mujer, otra exclamó que no podía beber de ese agua por ser 'haram', es decir, "impura". Asia Bibi explica que la mujer empezó a decir que ella, cristiana, había mancillado el agua del pozo bebiendo de su vaso y reintroduciéndolo en el pozo varias veces.

Entonces, Asia Bibi decidió "por una vez" defenderse y dijo: "Me da la impresión de que Jesús tendría un punto de vista diferente al de Mahoma sobre la cuestión". "¿Cómo te atreves a hablar por boca del profeta, bestia inmunda?", le contestaron las otras, según cuenta Bibi. Después de esto, afirma que la escupieron, empujaron y tiraron al suelo gritándole "puta" y "sucia".

Así lo relata la propia Bibi en el libro 'Sacadme de Aquí' (Libros Libres), de la periodista francesa Anne-Isabelle Tollet, que para hacerle la entrevista acudió todas las semanas durante dos meses a la cárcel junto al marido de Bibi, gracias al contacto del ministro de Minorías del país, Shahbaz Bhatti, que, poco después, fue asesinado por apoyar a Bibi, al igual que el gobernador de Penjab, Salman Tasser.

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