Actualizado 02/09/2010 20:34

Los médicos nazis participaron activamente en la 'Solución Final' seleccionando y matando a judíos, según un experto

Judíos en el campo de exterminio de Buchenwald
MARGARET BOURKE-WHITE

Unos 500.000 judíos sobrevivieron a los campos de exterminio y unos 5.200 españoles fueron salvados de las Casas Españolas de Budapest


MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los médicos nazis participaron activamente en la 'Solución Final' seleccionando y matando a judíos, gitanos, discapacitados y otras minorías que no entraban en el ideal de raza aria y reducir así el gasto del Estado en la atención de los llamados 'seres improductivos', según ha afirmado el profesor del Departamento de Medicina, de la Unidad de Medicina de Familia y Atención Primaria de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Esteban González.

Así, ha destacado, durante un acto informativo sobre el curso 'Enseñanzas del Holocausto para la medicina actual' --que organizan la UAM y la Casa Sefarad-Israelí y que se celebra del 1 al 3 de septiembre-- que fueron los ejecutores de todas las ideas políticas nazis. De hecho, ha explicado que el papel fundamental que tuvieron los profesionales de la medicina en el Holocausto ('Shoah' en 'jewish') queda demostrado porque "el segundo de los juicios de Nuremberg fue el de los médicos".

La directora del área del Holocausto de Casa Sefarad-Israelí, Henar Corbi, que ha presidido el acto, ha declarado que el primer objetivo de Casa Sefarad --creada en 2007-- era crear docentes --se ha impartido formación a unos 500-- y que ahora es la primera vez que la formación se da a médicos. "Es muy importante la parte académica y el rigor científico, además de valorar los testimonios de los testigos directos de aquella catástrofe", ha valorado.

González ha precisado que el Holocausto ha servido para sacar en claro una serie de enseñanzas de lo que no se puede hacer. "Temas como la colaboración médica, el gasto sanitario para cuidar a los enfermos, la ética médica y preguntas cómo a quién se le da el alta porque hacen falta camas vacías en los hospitales o qué medicación recetar porque es más o menos barata que otra han surgido tras las prácticas de los médicos nazis" ha indicado.

En cuanto a la labor desempeñada por los especialistas, el director del departamento de habla hispana de la Escuela Internacional para el Estudio del Holocausto de Yad Vashem (Jerusalén), Mario Sinay, ha precisado que la misión central del doctor Carl Clauberg --uno de los 23 médicos encargados de la esterilización, aunque el más conocido sea Jofef Mengele y sus experimentos con enanos y gemelos-- era la esterilización masiva del pueblo judío. "Para ello utilizaban a mujeres vírgenes y casadas como grupos de control y las esterilizaban mediante cirugía y radiaciones".

Una de las mujeres que sufrió experimentos médicos, la griega Mazaltov Behar Mordoh (Salónica, 1925), ha explicado cómo vivió los experimentos dirigidos por el médico que le fue adjudicado, el doctor Horst Schumann. "Yo tenía 17 años y estaba en el campo 10 de Auschwitz, donde se realizan los experimentos médicos. Cuando vino mi médico, seleccionó a muchas jóvenes. Tiempo después de aquel día, me iba a operar un médico judío de 80 años y la enfermera que lo acompañaba le decía que no lo hiciera", ha relatado.

La operación, como han señalado González y Sinay, consistía en la radiación de los ovarios. A Behar le "pudrieron uno" y un doctor llamado Samuel --cuando, años después, tuvo un hijo, Behar lo llamó David Samuel en honor a este médico--, la salvó e impidió que le radiaran el otro y, además, le había extirpado el ovario dañado, "aun sabiendo que lo iban a matar por haberlo hecho", ha indicado. "Le pregunté al médico si podría tener hijos", ha comentado Behar. "El doctor me contestó que si debía tener hijos los tendría y si no, no, pero que no influiría el hecho de tener sólo un ovario".

"LA ENFERMERA ME DABA QUINCE PASTILLAS AL DÍA"

Tras la operación --además de dañarle el ovario se quedó sin uno de los riñones--, la enfermera que acompañaba al médico judío de 80 años le daba quince pastillas al día. Esa misma enfermera, de la que se hizo amiga, la salvó en dos ocasiones cuando los nazis querían llevarla al crematorio. "Me incluyeron en la lista de mujeres casadas a pesar de que era virgen y eso me salvó la vida porque yo no era una joven sana", ha reconocido.

A este respecto, el médico francés Henri Borland --fue deportado a Auschwitz-Birkenau cuando tenía quince años y sobrevivió, además, a los campos de concentración y exterminio de Sachsenahüsen-Oranienburg y Buchenwald--, ha explicado que nunca admitían estar enfermos, "aunque padeciesen disentería, tuberculosis o tuvieran 40 grados de fiebre". También ha comentado que cuando llegó a Auschwitz lo primero que le dijeron fue que "nunca debía ir al hospital porque después serían enviados al crematorio".

Pero los campos de exterminio no sólo estaban poblados de judíos, gitanos u otras minorías. También hubo españoles, concretamente en las Casas Españolas en el gueto de Budapest. Uno de los supervivientes de estas casas, Jaime Vándor Koppel, ha recordado que unos 5.200 españoles fueron salvados gracias a la labor de dos hombres que trabajaron "a espaldas del Gobierno español, que no había dado ninguna orden para salvar a personas de los campos de exterminio": Ángel Sanz Briz y Josep Berlasca. Además, Sinay ha cifrado en unos 500.000 los judíos que sobrevivieron a los campos de exterminio.

MÁS 50 AÑOS DE SILENCIO

Por su parte, Borland ha destacado que durante más de 50 años tras el Holocausto en Francia no se ha hablado de este tema. "Las instituciones francesas que habían colaborado con los nazis estaban en el poder después de la II Guerra Mundial y se concentraron en hablar sobre la resistencia al nazismo con la voluntad de que se olvidara el colaboracionismo. Inmediatamente después, llegó la Guerra Fría y el enemigo ya no era el nazismo: eran los comunistas", ha detallado.

Asimismo, ha dicho que muchas víctimas no querían hablar sobre la experiencia. "Nunca se lo había contado a mi hijo hasta hace poco", ha reconocido Behar, y, de esta manera, se ha producido un salto generacional, "por lo que han sido los nietos los que han empezado a saber lo que ocurrió", ha comentado Sinay.

Por último, Sinay ha querido recalcar que el Holocausto sucedió a mediados del siglo XX, y que al igual que sucedió "puede volver a ocurrir".

Leer más acerca de: