Actualizado 08/10/2010 14:03

El preso político Liu Xiaobo obtiene el Nobel de la Paz por su lucha "en favor de los DDHH en China"

Liu Xiaobo
Reuters

China había advertido a Noruega de que el galardón a Liu podría afectar a las relaciones diplomáticas y comerciales


OSLO, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El disidente y preso político chino Liu Xiaobo ha obtenido el Premio Nobel de la Paz 2010 por "su larga y no violenta lucha en favor de los Derechos Humanos elementales en China", según informó este viernes el Comité Nobel noruego. El nombre de Liu figuraba entre los más destacados en las quinielas y el Gobierno de Pekín había advertido a Noruega de que habría consecuencias en caso de ser galardonado.

Liu, un antiguo profesor de Literatura de 54 años de edad, fue condenado a once años de cárcel el pasado mes de diciembre por redactar un manifiesto en 2008 junto a otros activistas de su país en el que reclamaba la libertad de expresión y la convocatoria de elecciones multipartidistas.

El viceministro chino de Asuntos Exteriores, Fiu Ying, había advertido este pasado verano al Instituto Nobel, durante una visita oficial a Oslo, de que las relaciones diplomáticas y comerciales entre China y Noruega podrían verse afectadas en caso de que Liu resultase premiado.

Asimismo, una portavoz del Ministerio declaró el pasado mes de septiembre que las actividades de Liu Xiaobo son "diametralmente opuestas a los objetivos del Premio Nobel". Noruega ha respondido a China que el Comité del Premio Nobel de la Paz --nombrado por el Palamento del país y formado por antiguos políticos-- es un órgano independiente.

En su comunicado, el Comité Nobel noruego anunció este viernes que "ha decidido conceder el Premio Nobel de la Paz 2010 a Liu Xiaobo por su larga y no violenta lucha en favor de los Derechos Humanos elementales en China".

El Comité, prosigue el texto, "considera desde hace tiempo que existe una estrecha relación entre Derechos Humanos y paz" y que tales derechos "son un requisito para la 'fraternidad entre las naciones' a la que se refirió Alfred Nobel en su testamento".

"En las últimas décadas, China ha logrado avances económicos difíciles de igualar en la historia", señala el Comité. "El país tiene en la actualidad la segunda economía más fuerte del mundo, cientos de millones de personas han salido de la pobreza y el ámbito de la participación política también se ha ampliado", prosigue.

Esta nueva situación de China "entraña mayores responsabilidades", estima el Comité noruego. "China forma parte de varios acuerdos internacionales de los que es signataria, así como dispone de sus propias disposiciones respecto a los derechos políticos", continúa.

Por ejemplo, precisa, "el artículo 35 de la la Constitución de China establece que 'los ciudadanos de la República Popular de China disfrutan de libertad de expresión, de prensa, de reunión, de asociación y de manifestación'". "En la práctica, está demostrado que estas libertades están claramente restringidas para los ciudadanos chinos", lamenta el Comité Nobel.

LIU XIAOBO

"Desde hace dos décadas, Liu Xiaobo ha sido un firme portavoz em favor de la aplicación de los Derechos Humanos fundamentales en China", afirma el comunicado.

El Comité recuerda que Liu participó en las protestas de Tiananmen en 1989 y "fue un autor destacado de la Carta 08, el manifiesto en favor de los Derechos Humanos en China publicado el 10 de diciembre de 2008 con motivo del 60 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de Naciones Unidas".

Tras los hechos de Tiananmen, permaneció encarcelado durante 20 meses y fue condenado posteriormente a tres años de "reeducación por el trabajo" y a varios meses de arresto domiciliario a lo largo de los años novebta.

En la Navidad de 2009, recuerda el comunicado, "Liu fue condenado a once años de cárcel y a dos años de privación de derechos políticos por 'incitar la subversión contra el poder del Estado'". "Liu ha mantenido coherentemente que esta sentencia viola tanto la propia Constitición de China como los Derechos Humanos fundamentales", añade.

Según el Comité Nobel, la campaña en favor de los Derechos Humanos universales "cuenta con el apoyo de numerosos chinos, tanto en la propia China como en el extranjero". "Mediante el duro castigo de que ha sido objeto, Liu se ha convertido en el más importante símbolo de esta amplia lucha por los Derechos Humanos en China", concluye el comunicado.