Actualizado 06/05/2010 16:20

El PP propone reformar la Ley de Igualdad para evitar abuso sexuales en prisiones

Centro Penitenciario Madrid I, en Alcalá Meco
EP


MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Parlamentario Popular ha registrado una proposición de Ley en el Congreso para modificar la Ley de Igualdad para evitar que las mujeres puedan trabajar en módulos penitenciarios para hombres y que funcionarios masculinos operen con las reclusas, a fin de que no se produzcan conflictos como el registrado en la cárcel de Madrid I (Alcalá Meco), donde algunas presidiarias obtenían prebendas de algunos trabajadores a cambio de favores sexuales.

La iniciativa, firmada por la portavoz del GPP, Soraya Sáenz de Santamaría, sostiene por un lado, que la mayor presencia de varones en cárceles para mujeres "puede dar lugar a conductas como las sucedidas en Alcalá Meco, donde se han denunciado abusos y relaciones sexuales entre presas y funcionarios y donde ha tenido que dimitir la cúpula directiva".

Por otra parte, la propuesta argumenta que desde que la Ley de Igualdad permitió a las mujeres trabajar en los módulos penitenciarios para hombres, "las trabajadoras sufren más vejaciones por parte de los internos, deben efectuar solas las rondas o recuentos nocturnos y entre las celdas se encuentran con amenazas, insinuaciones y hasta acoso sexual".

"El nivel de conflictividad de los módulos de internos es muy superior al de las mujeres presas en España; la diferencia física, las posibles agresiones de todo tipo dentro de un colectivo en el que un 75% son personas con diferentes trastornos que van de los psicóticos a la inadaptación, falta de control, violencia y demás, ponen en riesgo la seguridad física de las funcionarias", asegura la propuesta.

Para el PP, restablecer las escalas femenina y masculina del Cuerpo de Ayudantes de Instituciones Penitenciarias "no es una discriminación, sino la consecuencia de un criterio de organización del trabajo adecuado y necesario por la especial naturaleza de las funciones y tareas a desempeñar por este colectivo en un entorno tan específico".

En este sentido, cita una sentencia de la Audiencia Nacional fechada el 7 de junio de 2006 según la cual, en las cárceles existen "puestos de trabajo adscritos en exclusiva a la escala masculina y también a la femenina cuya reserva viene motivada por las funciones que a estos puestos de trabajo están atribuidas" y que "justifican sobradamente que las personas encargadas pertenezcan a una u otra escala".

Además, la formación recuerda que en junio de 2009, el Pleno del Congreso aprobó una iniciativa que instaba al Gobierno, entre otras cosas, a iniciar un "proceso de diálogo con Instituciones Penitenciarias y los representantes de las (funcionarias) afectadas con el objetivo de resolver estos problemas", mandato al que el Ejecutivo "no ha dado cumplimiento".

"Al igual que a nadie se le ha ocurrido que en aplicación de la ley de igualdad haya que ir hacia cárceles mixtas, no hay razón discriminatoria alguna que justifique someter a los funcionarios de las escalas masculina y femenina a un proceso de integración que les perjudica a ellos y a los reclusos y que, en general, somete al sistema penitenciario a unas tensiones innecesarias", explica el GPP.