Actualizado 03/05/2013 16:08

Fundación Bancaja abre un 'Gabinete Sorolla' con la obra más "comprometida" del artista

Blanca Pons Sorolla, junto a Ripoll y Montesinos, presenta 'Triste herencia'
EUROPA PRESS

'¡Triste herencia!' viajará, tras su exhibición en Valencia, a Estados Unidos en una exposición sobre el pintor


VALENCIA, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Bancaja inaugura en su Centro Cultural de Valencia un nuevo 'Gabinete Sorolla' --un espacio de exposición permanente dedicado al pintor-- con la exhibición de la obra '¡Triste herencia!', que refleja la faceta más "comprometida socialmente" del creador.

La iniciativa, cuya apertura coincide con el 150 aniversario del natalicio del autor, ha sido presentada este viernes este rueda de prensa por la bisnieta de Joaquín Sorolla (Valencia, 27 de febrero de 1863-Cercedilla, Madrid, 10 de agosto de 1923), Blanca Pons-Sorolla, el secretario autonómico de Cultura, Rafael Ripoll, y el vicepresidente de la Fundación Bancaja, Vicente Montesinos.

'Triste herencia', pintado en 1899 en la playa del Cabanyal de Valencia, es una obra capital en la producción del artista que ahora regresa al lugar donde fue creada para que pueda ser admirada hasta el próximo 2 de noviembre para, posteriormente, formar parte de los fondos de la exposición 'Sorolla y América', que recorrerá ciudades estadounidenses como Dallas y San Diego, además de Madrid, ha explicado la descendiente del autor.

El cuadro ha protagonizado un largo periplo, puesto que, tras obtener el premio Grand Prix de la Exposición Universal de París de 1900, fue ofrecido al Estado español, que no pagó las 40.000 pesetas que en aquel momento se pidieron por la pieza. Finalmente, se vendió a un coleccionista residente en Nueva York que la cedió, a su vez, a la Iglesia de la Quinta Avenida de Nueva York, donde estuvo depositada durante más de 70 años.

"NUNCA DEBIÓ SALIR DE ESPAÑA"

En 1981, fue adquirida por la entonces Caja de Ahorros de Valencia por una cantidad nunca alcanzada hasta ese momento por un Sorolla, 240.000 dólares (22.250.000 pesetas de la época). Fue --ha recalcado la bisnieta -- "una de las acciones más importantes en la recuperación del patrimonio español, puesto que esta obra nunca debía haber salido de España".

'¡Triste herencia!' --título, por cierto, sugerido a Joaquín Sorolla por el escritor Vicente Blasco Ibáñez-- fue fruto de la impresión que causó en el creador, durante un paseo por la playa de la Malvarrosa, las figuras de niños enfermos rodeando a un monje, que en la obra destaca con hábito negro.

Así, la escena plasma el drama social de los menores acogidos por el hospital de San Juan de Dios, retratados en el momento del baño. La elaboración del cuadro no fue fácil --el autor, incluso, pensó en abandonarlo y persistió gracias al consejo de Blasco Ibáñez y Soriano-- pero, finalmente, compuso un trabajo que aludía a las teorías degeneracionistas de finales del siglo XIX, según las cuales, los vicios de los padres provocaban graves problemas en los hijos.

EL MAR COMO CURACIÓN

A pesar de que esta es una imagen más triste y sombría de lo habitual en producción del autor valenciano (razón por la cual la luz procede en esta ocasión de un atardecer), el mar sigue estando presente y aparece como un modo de curación, y esperanza, para los niños, ha hecho notar Pons-Sorolla.

Junto a esta pintura, en el 'Gabinete Sorolla' se exhiben reproducciones de tres de los estudios previos que el artista realizó para el cuadro, además de documentos históricos y fotografías que la sitúan en su contexto.

A través de este nuevo espacio expositivo, la Fundación Bancaja "acercará al público" su colección Sorolla, que incluye una quincena de piezas, ha apuntado el vicepresidente de la entidad, que ha recordado que la recaudación lograda por la entrada a esta muestra y al resto de selecciones que acoge el centro cultural se destina a las organizaciones solidarias Cáritas, Proyecto Hombre y Cruz Roja.

Por su parte, Rafael Ripoll ha celebrado que esta iniciativa de la fundación se une a las diversas actividades que la Generalitat está desarrollando para poner en valor el legado de Sorolla, entre la que ha citado la sala que lleva su nombre en el Museo de Bellas Arts San Pío V.