Actualizado 01/02/2013 13:48

Amnistía denuncia la muerte de civiles a manos del Ejército, los islamistas y las fuerzas francesas en Malí

Recoge indicios sobre ejecuciones extrajudiciales por parte de militares e insurgentes y la muerte de cinco civiles en un ataque aéreo


MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este viernes en un comunicado que tanto el Ejército nacional como las milicias islamistas han cometido ejecuciones extrajudiciales y otros abusos contra los Derechos Humanos durante el actual conflicto armado de Malí y ha advertido de que al menos cinco civiles podrían haber muerto durante un ataque aéreo de las fuerzas francesas.

Los datos recogidos por una delegación de AI que ha recorrido el país durante diez días revelan que el Ejército de Malí ha cometido graves violaciones de Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario durante su ofensiva contra los grupos armados islamistas, incluidas varias "ejecuciones extrajudiciales de civiles".

Asimismo, el informe de la delegación revela los graves abusos cometidos por los grupos armados islamistas, "como homicidios ilegítimos y reclutamiento de niños soldados", y advierte de que, según ciertas informaciones, "al menos cinco civiles, tres de ellos niños", murieron durante un ataque aéreo en el marco de la operación conjunta francesa y maliense.

"Mientras continúan los combates en Malí, todas las partes en el conflicto deben garantizar que respetan el Derecho Internacional Humanitario", ha advertido el investigador de Amnistía Internacional sobre Malí, Gaëtan Mootoo. Concretamente, las partes enfrentadas deben "garantizar un trato humano a los prisioneros" y tomar "todas las precauciones necesarias para reducir al mínimo los daños causados a la población civil", ha añadido.

ABUSOS DEL EJÉRCITO

Durante su visita, la delegación de Amnistía Internacional llevó a cabo una investigación en las ciudades de Ségou, Sévaré, Niono, Konna y Diabaly. Los testimonios recogidos por la organización "indican que el 10 de enero de 2013, víspera de la intervención francesa, el Ejército de Malí detuvo y ejecutó extrajudicialmente a más de una veintena de civiles, la mayoría en la ciudad de Sévaré, en el norte del país", prosigue el comunicado.

En Sévaré, varios testigos presenciales contaron que habían visto cómo los soldados arrojaban los cuerpos de varias personas a un pozo en el barrio de Waïludé. "Una vez arrojados los cuerpos al fondo del pozo, los soldados dispararon dos o tres ráfagas de ametralladora dentro del pozo", declaró uno de los informantes.

Algunos testigos aseguraron también a AI que las fuerzas de seguridad de Malí habían actuado contra personas de las que sospechaban que tenían alguna relación con grupos armados islamistas, "a menudo por motivos muy poco fundados, como su indumentaria o su origen étnico".

Al respecto, la investigación de Amnistía también ha sacado a la luz algunas detenciones arbitrarias por parte del Ejército de personas sospechosas de vinculación con los grupos armados islamistas. Los delegados de Amnistía Internacional se entrevistaron con varios testigos que declararon que habían sufrido palizas u otros malos tratos mientras permanecieron en cautividad.

"Mucha gente tiene realmente miedo a ser detenida, o algo peor, por los militares", ha afirmado Mootoo. "Las fuerzas de seguridad deben garantizar que se protege a las personas de cualquier represalia a causa de su etnia o sus supuestas simpatías políticas", ha advertido.

"Las autoridades deben también emprender de inmediato investigaciones independientes e imparciales sobre todo informe de ejecución extrajudicial cometida por las fuerzas armadas, y suspender en sus funciones a todo integrante de organismos de seguridad sospechoso de estar implicado en violaciones de Derechos Humanos.

EJECUCIONES POR PARTE DE ISLAMISTAS

Amnistía Internacional también ha documentado informaciones sobre ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo por los islamistas radicales que controlaban el norte de Malí. Varios testigos de los hechos contaron cómo los milicianos habían ejecutado sumariamente a cinco soldados malienses heridos y a un civil en Diabaly los días 14 y 15 de enero, tras la captura de la ciudad por parte de los grupos armados islamistas.

Además, según AI, "son cada vez más abundantes los indicios de que los radicales islamistas han reclutado por la fuerza y usado a niños soldados en sus filas". En Diabaly (centro), varias personas contaron que habían visto a niños, algunos con solo diez años de edad, armados con fusiles junto con los combatientes islamistas.

En Ségou, Amnistía Internacional pudo entrevistarse con dos niños soldados que habían sido capturados, uno de los cuales mostraba signos de enfermedad mental. "El niño estaba silencioso y abatido, y no pudo hablar con nosotros; parecía que su mente no estaba allí del todo", ha recordado Mootoo.

MUERTE DE CIVILES DURANTE UN ATAQUE AÉREO

Por otra parte, los delegados han obtenido "indicios preocupantes" sobre la muerte de cinco civiles --entre ellos una madre y sus tres hijos de corta edad-- durante un ataque aéreo lanzado en el contexto de una contraofensiva de las tropas francesas y malienses. El ataque se produjo la mañana del pasado 11 de enero, primer día de la intervención francesa, en la ciudad de Konna (centro).

Varios responsables franceses aseguraron a Amnistía Internacional que las tropas galas no habían llevado a cabo ningún ataque a esa hora en Konna. No obstante, un miembro del Gobierno maliense y un oficial militar de alto rango del país confirmaron a la organización que en la mañana del 11 de enero se había iniciado una operación conjunta dirigida contra la ciudad con la participación de militares franceses.

"Es absolutamente imprescindible que tanto Francia como Malí lleven a cabo una investigación para determinar quién llevó a cabo ese ataque", ha advertido Mootoo. "Las conclusiones deben hacerse públicas en su integridad para que se pueda determinar si se cometió alguna violación del Derecho Internacional", ha manifestado.