Publicado 05/03/2014 13:35

Ayuda en Acción denuncia la invisibilidad de los 910 millones de mujeres que viven en la extrema pobreza en el mundo

Salva Campillo
SALVA CAMPILLO

MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El 70 por ciento de quienes viven en el mundo en situación de extrema pobreza son mujeres, más de 910 millones de personas que tienen la vulneración de sus derechos fundamentales en el orden del día y cuyas historias, como las del resto de mujeres que viven en el Sur, son invisibles para el Norte.

Esta es una de las premisas de la campaña de Ayuda en Acción #Mujeresinvisibles, que a partir de la difusión de historias de mujeres que luchan por los derechos de todas en los países en los que trabaja la organización, persigue visibilizar los obstáculos sociales, económicos y culturales a los que millones de ellas se enfrentan diariamente.

"En pleno siglo XXI, no existe ningún país en el mundo en el que mujeres y hombres disfruten de los mismos derechos y oportunidades. Las mujeres de los países empobrecidos, a pesar de producir el 70% de los alimentos, no poseen ni el 2% de la tierra cultivable. Ser pobre, ser niña o vivir en una zona en conflicto aumenta además la probabilidad de no acceder a la educación", explica la ONG.

En este contexto, destaca el trabajo que realizan mujeres como Yoni Hinojosa, peruana de 45 años de edad que se ha convertido en la primera alcaldesa del municipio rural de Chacán, con 5.000 habitantes. Según cuenta Ayuda en Acción, desde que llegó al poder hace tres años, su principal objetivo ha sido defender los derechos de la mujer y acabar con su invisibilidad.

Gracias a su labor, en la actualidad más de un centenar de mujeres de Chacán participan en proyectos de hospedaje para turistas y una asociación de artesanas, en los que aprenden a generar sus propios ingresos, ganando en independencia frente al machismo imperante.

En Bolivia, un grupo de mujeres agricultoras también está cambiando las cosas. Unidas en asociación de productoras de Muyupampa (AMPROM), cuentan cada una con su apiario en casa y se reúnen periódicamente para convertir la miel en 20 tipos de productos que les permiten autonomía económica.

"A Luciana, Ibeth y Cilda, trabajar no sólo les ha permitido ser económicamente independientes, sino ganar en autoestima y en reconocimiento social, además de sacar adelante a sus hijos y costear su educación", destaca Ayuda en Acción. Ahora, ya no son invisibles.