Actualizado 04/10/2013 19:00

Ayuda en Acción lanza un proyecto social enfocado a niños españoles

Ayuda en acción proyecto en España
Foto: AYUDA EN ACCIÓN

Sufragará becas de comedor y gastos de escolarización a más de mil niños en 20 colegios de seis comunidades autónomas

   MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

   La ONG Ayuda en Acción, que lleva 30 años trabajando en cooperación para el desarrollo de los países del Sur, ha puesto en marcha por primera vez en su historia un proyecto cuyos destinatarios están en España: los niños cuyas familias afrontan una situación tal a cuenta de la crisis económica y los recortes en ayudas sociales, que no pueden cubrir ni los gastos de escolarización de sus hijos ni, en muchos casos, su alimentación.

   Según han explicado en rueda de prensa la directora general de Ayuda en Acción, Patricia Moreira, y su coordinador de Campañas, Alberto Casado, esta decisión se ha adoptado, entre otras razones, por "corresponsabilidad", ya que "Ayuda en Acción existe gracias al compromiso y la solidaridad de los españoles", y en la situación actual, "no puede cerrar los ojos". "La desigualdad ha crecido mucho en España", ha señalado Casado.

   Por eso, han puesto en marcha un programa por el que se facilitarán a colegios de la red pública y concertada recursos económicos suficientes para que ellos, a su vez, puedan becar a sus alumnos tanto en servicios de alimentación --desayuno, almuerzo, comida y merienda-- como en libros de texto o actividades extraescolares, a las que muchos deben renunciar por falta de recursos.

   Los centros realizan la selección de los beneficiarios, organizan las ayudas, garantizan que las reciben quienes realmente las necesitan e involucran a toda la comunidad educativa en el proyecto, pidiendo a cambio el compromiso personal de las familias, que en muchos casos colaboran en el reparto de los desayunos, sustituyen a los monitores de comedor para abaratar el servicio, organizan fiestas, pintan murales o aportan haciendo pequeñas tareas de mantenimiento, entre otros.

   Como punto de partida formarán parte del proyecto 20 colegios de nueve localidades en seis comunidades autónomas con un universo de más de 6.000 alumnos de los que al menos 1.060 recibirán directamente becas de libros o de comedor. La ONG ha iniciado el programa con fondos propios, desembolsando 380.000 euros, aunque confía en recabar los apoyos sociales o empresariales suficientes para poder ampliar la red de centros.

   El objetivo es desarrollar el programa en el medio y largo plazo que por un lado, garantice que todos los alumnos del colegio "tienen al menos las mismas oportunidades de partida" ya que se cubren sus necesidades básicas y, por otro, consiga que los propios centros se conviertan "en dinamizadores del barrio". "Que sea un referente de comunidad", ha concretado Casado.

   Por eso, para elegir los centros que se beneficiarán del proyecto, la entidad se fija en aquellos que "van más allá del ámbito meramente didáctico" y hacen comunidad. Este ha sido el caso del colegio público que dirige en el madrileño barrio de La Latina Luis Esteban, que desde el 1 de octubre es oficialmente parte de este proyecto de Ayuda en Acción, con 28 alumnos becados.

"ARROZ, LEGUMBRE Y PASTILLA DE CALDO"

   Según ha explicado, su centro ha pasado en a penas unos años de recibir de la Administración Pública más de 100 becas de comedor con entre 40.000 y 50.000 euros y hasta 8.000 euros para préstamos de libros en el centro y que en la actualidad, las ayudas de comedor, "porque no son becas, sino el servicio a precio reducido", no lleguen a 15.000 euros y para los libros, haya menos de 2.800.

   "Vemos niños que vienen sin desayunar, que no pueden participar en las actividades escolares fuera del centro porque no tienen ni para el autobús y que tienen carencias nutricionales", ha explicado Esteban en la rueda de prensa, para incidir en que "hay malnutrición", porque muchos chicos en sus casas sólo se alimentan ya a base de hidratos de carbono y pastillas de caldo.

   En su centro, la llegada de Ayuda en Acción va a permitir que 28 niños desayunen, almuercen, coman en el comedor, tengan una merienda, dispongan del material escolar y los libros que necesiten e incluso puedan participar en actividades extraescolares, ya que se ha acordado con las empresas privadas que las imparten la incorporación de una plaza gratuita por cada grupo de alumnos. Estos estudiantes no están en un grupo especial, sino integrados en la normalidad de la actividad del centro.

   En el concertado madrileño donde desarrolla su labor la trabajadora social Laura Calles, donde nueve de cada diez alumnos son de familia inmigrante, las carencias han llevado a los profesores a poner dinero para equipar las aulas con galletas y productos similares. "Hay chicos que no desayunan, no llevan nada para media mañana y a la hora de comer, arroz, legumbre y ya. Después mala merienda y cena escasita", ha señalado.

   En su colegio han pasado de 120 becas de comedor a 40 ayudas de precio reducido: 40 euros con los que se supone que una familia debe pagar el comedor de un mes y que muchas directamente no piden porque no pueden afrontar el resto del coste o porque "están cansados de pasear su vida y su intimidad por todas partes para luego nada". "Ahora, va a haber niños que estén bien alimentados y sus familias van a poder destinar el dinero a otras cosas también muy necesarias", ha destacado.