Actualizado 15/07/2010 13:24

El CICR reclama 20 millones de euros adicionales para afrontar la crisis interétnica en Kirguistán

GINEBRA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha reclamado a sus donantes una cantidad adicional de casi 27 millones de francos suizos (poco más de 20 millones de euros) para afrontar la situación de emergencia que se vive en Kirguistán a causa de los recientes enfrentamientos interétnicos en el sur del país. Con esta cantidad, el presupuesto de CICR para 2010 en Asia Central ascendería a 37,5 millones de francos suizos (casi 28 millones de euros).

Inmediatamente después de que comenzaran los disturbios entre uzbekos y kirguises el pasado mes de junio en la ciudad meridional de Osh, el CICR y la Sociedad de la Media Luna Roja de Kirguistán reforzaron la operación de asistencia y dieron prioridad a las actividades efectuadas para subvenir a las necesidades de los heridos, los enfermos y las personas particularmente vulnerables, como los desplazados internos y las personas cuyas viviendas habían sido destruidas.

"Las tensiones no desaparecen de un día a otro. Aún sigue habiendo una profunda desconfianza entre las comunidades", declaró la jefa adjunta de Actividades Operacionales del CICR para Europa Oriental y Asia Central, Nadine Bague.

La finalidad principal de las actividades del CICR será seguir prestando asistencia a las comunidades afectadas en la respectiva zona de residencia, a los desplazados internos y a las familias de acogida. Asimismo, la institución trata de visitar a todas las personas detenidas, en particular a las personas arrestadas en relación con la violencia, así como de ayudar a las familias a saber la suerte corrida por sus seres queridos dados por desaparecidos.

"La cuestión de los desaparecidos aviva aún más las tensiones. Dado que hay rumores acerca de tomas de rehenes, no sólo es de capital importancia esclarecer la suerte que han corrido los desaparecidos, sino que con ello se pueden mitigar también las tensiones", declaró Bague. "Una de las medidas más apremiantes es potenciar la capacidad de los servicios forenses locales para identificar los cadáveres recogidos o los restos mortales", añadió.

El CICR ha incrementado su presencia en Kirguistán donde, además de la oficina en Bishkek, dispone ahora de representaciones en Osh y en Jalalabad. Actualmente, el CICR tiene una plantilla de 36 expatriados y 84 empleados locales que trabajan en varias partes del país.